El distrito Italia, una "ciudad" abandonada a voluntad de la MS13

La Policía entra en patrullas; los pandilleros se esconden. Cuando el carro policial sale, vuelven a sus puestos de vigilancia. Allí, los pandilleros manejan casi todos los negocios

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En el Distrito Italia podrían estar viviendo unos 1,500 miembros de pandillas, según fuentes policiales que conocen bien el lugar. FOTO EDH / ARCHIVO

Por El Diario de Hoy

2021-11-27 10:40:48

Residentes, policías y militares asignados al Distrito Italia son contundentes en admitir que esa comunidad del municipio de Tonacatepeque ha sido abandonada, por no decir entregada, a miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13), a la clica DLS (Distritos Locos Salvatruchas).

Las llegadas que hacen las fuerzas de seguridad son como “cachetadas de payaso” o “compadre hablado”, aseguran las fuentes que están inconformes con las órdenes que reciben o que ya no aguantan a los pandilleros en sus domicilios.

Por ejemplo, afirman vecinos y policías, el 11 de noviembre anterior, en lo más álgido del aumento de los homicidios, 500 miembros de las fuerzas de seguridad incursionaron en el Distrito Italia.

Los formaron a todos en la entrada de esa comunidad y allí mismo instalaron el puesto de mando. Pero media hora antes, un helicóptero policial sobrevoló a baja altura la zona. Era obvio que los ‘postes’ (vigías) vieron la formación de policías en la entrada. Y los pandilleros huyeron.

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Y es que, según las fuentes, los pandilleros de ese lugar tiene informantes desde el desvío a Tonacatepeque, sobre la carretera Troncal del Norte. Desde ahí comienza la vigilancia sobre movimientos policiales e ingreso de personas que no son de la zona. Los “postes” están en cada pasaje. Y en los alrededores del puesto policial mantienen vigilancia las 24 horas, según agentes policiales.

A lo anterior hay que añadirle que en el transporte colectivo también montan vigilancia. Y la Policía no lo ignora.
Las fuentes aseguran que el 11 de noviembre, además del decomiso de los $49,295 y dos sospechosos capturados por tener esa suma de dinero, no hubo más arrestos.

El Distrito Italia se ha convertido en un refugio seguro para pandilleros de alto rango, como uno de la Nueva Concepción que se mueve por el lugar con un séquito de guardaespaldas, según fuentes policiales.

De hecho, se aseguró a El Diario de Hoy que en vista de que el Distrito Italia se ha vuelto refugio para pandilleros, estos la llaman “La Ciudad”.

Los negocios en el Distrito Italia los operan pandilleros

El pasado 11 de noviembre, el gobierno anunció con pompa el decomiso de los $49,295 que encontraron en una funeraria que funciona en el Distrito Italia. La cuenta de Twitter de la Policía Nacional Civil (PNC) mostró a dos hombres de aspecto joven, capturados por no poder justificar el origen legal de tal suma.

Hasta el mismo Nayib Bukele comentó el decomiso de dinero en esa comunidad, asegurando que en los decomisos de dinero a delincuentes solo se miraban dólares, no bitcoin, cuya circulación o transacciones promueve su gobierno a través de la Chivo Wallet.

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Sin embargo, en el Distrito Italia la organización criminal que controla ese territorio ha establecido toda una estructura económica con negocios aparentemente legales a quienes son ajenos a esa comunidad.

Uno de los que más sobresale, afirman fuentes policiales, es una pupusería. La más grande del lugar. Esa funciona en un inmueble que pertenece al Estado, donde antaño funcionó una oficina estatal, aseguran.

Y el Estado sabe sobre la usurpación de ese inmueble. De acuerdo con lugareños y policías, hace unos 5
o 6 años, funcionarios o empleados del Ministerio de Gobernación llegaron a verificar pero no dijeron nada.
La pupusería continúa, aseguran.

Otro negocio en el que aparentemente le va bien a los pandilleros es en la venta de pollo frito y el de agua purificada y envasada que ellos mismos distribuyen a los vecinos o a través de tiendas locales.

Muchas de las tiendas que funcionan en esa comunidad también pertenecen a la MS-13 o cuando menos, a familiares de pandilleros.  Y estas no pagan extorsión. El resto, cuyos dueños no tienen vínculos con pandillas, sí deben pagar la llamada renta a la pandilla.

La MS-13 del Distrito Italia también se ha agenciado el negocio de distribución de gas propano, aseguran las fuentes. Incluso, dicen, esa misma organización criminal controla algunas iglesias evangélicas.

Controlan el transporte interno como en otras zonas

No es nada nuevo que en muchos lugares, las pandillas son quienes manejan el negocio de transporte
de personas en vehículos, a manera de taxis. Lo hacen las dos pandillas en diversos municipios.

En Tonacatepeque, en el centro de ese pueblo, es la MS-13, la que se encarga de autorizar, de palabra, la
inclusión de los automóviles particulares de quienes buscan ganarse la vida trabajando de esa manera.

Primero tienen que dar una especie de prima o pago de derecho, lo cual puede ascender a varios cientos de dólares. Luego se quedan pagando una cuota semanal a la pandilla. Quien no está dispuesto a pagar tampoco puede trabajar.

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Eso sucede también en el centro de Apopa, afirman fuentes de la delegación policial, donde la pandilla 18 Revolucionaria tiene una flotilla de pequeños vehículos.

Los pandilleros también tienen sus propios vehículos; claro, a nombre de testaferros. Sucede también en varias colonias de Soyapango, en La Campanera, por ejemplo. De acuerdo con habitantes de estos lugares, los pandilleros saben que muchos conductores por plataformas digitales no se atreven a llegar hasta esos lugares. Y eso está siendo aprovechado por los grupos criminales.

Inoperancia policial

“Ejecutamos incursión policial en Urbanización Distrito Italia, Tonacatepeque, para identificar a miembros de grupos criminales que se dedican a delinquir en la zona, no vamos a darle tregua a los delincuentes”, escribió la PNC, a las 4:02 a.m. del 11 de noviembre en su cuenta de Twitter.

Algunos usuarios de esa red social criticaron el hecho de que la Policía escribiera que la “incursión era
para identificar”; en tanto que fuentes policiales calificaron la incursión como un intento de mostrar acción ante la escalada de homicidios que las pandillas habían efectuado 48 horas antes.

Esa escalada de violencia dejó 45 muertes en tres días. La mayoría de los crímenes fueron cometidos en
el departamento de San Salvador.

Algunas fuentes policiales declararon a El Diario de Hoy que no fueron pandilleros ni personas vinculadas a esas estructuras criminales las víctimas.

De hecho, especialistas en temas de seguridad dijeron que el repunte de homicidios dejó claro una vez más el poder que tienen las pandillas para subir o bajar los homicidios.

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Algunos incluso recordaron las presuntas negociaciones entre el gobierno actual y las pandillas, mismas que han quedado al descubierto en investigaciones periodísticas como las publicadas en El Faro.

De acuerdo con fuentes policiales, la Policía sabe dónde están los pandilleros, quiénes son los cabecillas, cuáles son los negocios que operan, pero tienen órdenes de “no molestar” a los pandilleros.

Lo anterior ha generado algunos problemas entre jefes policiales de la zona, dijeron los informantes. “Hay quienes no están de acuerdo con esa inoperancia policial”, sostuvo una fuente policial.

“Incluso, hace como un año dieron la orden de que ya no se cuidara un lugar donde supuestamente hay varias tumbas clandestinas y que podrían haber unos 20 cadáveres”, afirmó un mando policial de Apopa.

Las fuentes aseguran que desde el pasado 11 de noviembre, hay un grupo de policías de la Subdirección
Táctica Operativa (STO) que está llegando con más frecuencia al Distrito Italia, pero nomás llegan a hacer presencia.

Incluso, aseguran que en la incursión del 11 de noviembre, en la que se emplearon unos 500 elementos, no hubo capturas, además de los dos sujetos a quienes se les decomisó dinero.