Hay evidencia clínica y médica de que los casos sospechosos de covid-19 se han disparado en los últimos días, en específico desde el 20 de diciembre pasado, cuando surgió la primera alerta desde la comunidad médica nacional. Expertos en epidemiología como el doctor Jorge Panameño plantearon desde entonces que para la segunda quincena de enero el país ya viviría una cuarta ola de contagios debido al ingreso de la variante ómicron al territorio, y es justo lo que está viviendo la población.
Son notorias las filas de personas que buscan asistencia médica en hospitales públicos y dependencias del Instituto Salvadoreño del Seguro Social; también los laboratorios privados registran un alza importante de personas que buscan hacerse las pruebas para detectar covid-19.
Las mismas cifras oficiales también apuntan a un alza importante. Si para el 1 de enero Salud solo reportaba 27 nuevos casos de covid-19, la cifra se disparó a 307 según el reporte del pasado 13 de enero.
Pero, aún con toda esta evidencia, el Ministerio de Salud no ha establecido nuevos lineamientos o restricciones, como tampoco ha confirmado que la variante ómicron ya circula en el país, hasta la fecha de esta nota.
El doctor Óscar Picardo Joao, investigador y académico de la Universidad Francisco Gavidia, planteó una hipótesis ante esta postura de silencio del Gobierno en cuanto a ómicron, y señaló que: "Muchos países, no sé si voluntariamente o no, al ver que el impacto es menor, que hay menos hospitalizados, que la letalidad es menor, quizá están dejando que esto suceda, para forzar la inmunidad de rebaño. Es como 'no hagamos mucha bulla, que se termine de contagiar la gente. Entre las vacunas y este contagio, en teoría, lograríamos la inmunidad más rápido' ".
La inmunidad colectiva o "de rebaño" ocurre cuando un porcentaje alto de la población, entre el 70% al 90%, ya genera suficientes anticuerpos ante la presencia de un virus, por lo cual el número de contagios se reduce, y por ende también la cifra de fallecimientos.
Distintos estudios científicos preliminares arrojan que ómicron es menos letal que las otras variantes anteriores, como delta, y que presenta síntomas mucho menos graves.
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Por otro lado, Picardo Joao lamentó que las autoridades de salud del país no mantienen la necesaria vigilancia genómica del comportamiento del virus SARS-CoV-2 en el territorio, algo que sí han hecho otros países para poder detectar con antelación las variantes del Coronavirus.
A todas luces, según el investigador, en El Salvador ya está circulando ómicron, más allá del silencio gubernamental.
"Lo más probable, por el tráfico de salvadoreños que tenemos de Estados Unidos, es que está lleno de ómicron aquí, sobre todo si no pides ni vacuna, ni pruebas ni nada para entrar aquí. Cuando antes había una obsesión por el control, la preocupación y el cierre, ahora que hay una variante, lo lógico es que se pidiera por lo menos la prueba de antígenos para entrar al país", argumentó el investigador.
En su último estudio de prospección del ómicron en El Salvador, la UFG concluyó que el 89.3% de la población se contagiará de esta variante, donde "prácticamente nos vamos a terminar contagiando casi todos", subrayó Picardo Joao, y explicó que en buena medida esto ocurre porque la movilidad de la población está con valores incluso más altos que antes de la pandemia, al comparar las cifras entre febrero-marzo de 2020 y el 9 de enero de 2022.
Según datos de Google Maps, hay 20% de mayor movilidad en tiendas y actividades de ocio; 43% más en supermercados y farmacias, 31% más en estaciones de transporte y 17% más en lugares de trabajo; aunque disminuye en 2% en parques y se mantiene igual en zonas residenciales.
Lo anterior se traduce en que "por más que tomes medidas en tu centro educativo u oficina, hay que estar claro que la movilidad de la gente, fuera de esos ambientes, está normal. Y eso es favorable al contagio", explicó Picardo Joao.
Que se cumplan las proyecciones de contagios que plantea la UFG "dependerá de las acciones de contención epidemiológica que haga el Gobierno", concluyó el especialista.