El obispo de la Diócesis de Sonsonate, monseñor Constantino Barrera, consideró este jueves que en el crimen del párroco de la iglesia del cantón San José La Majada, en Juayúa, Sonsonate, padre José Cecilio Pérez, hay más involucrados y no sólo Abraham Heriberto Mestizo Pérez, de 34 años, quien fue capturado el lunes por la Policía Nacional Civil (PNC) a través de una orden administrativa que giró la Fiscalía General de la República (FGR).
El sacerdote habría sido asesinado la noche del viernes 17 de mayo; pero fue encontrado hasta el día siguiente en su habitación, en la casa parroquial.
En su momento, se dijo que un grupo de feligreses se había congregado frente a la casa parroquial porque ese sábado a las 5:00 de la mañana saldrían, junto al padre, a rezar el rosario en las calles de la comunidad.
Sin embargo, tras 30 minutos de espera, llamaron al sacristán para que abriera las puertas de la casa parroquial, encontrando muerto al religioso.
“Esta captura es una reacción queriendo resolver, pienso yo, pero si hay pruebas técnico-científicas como se dijo, ellos tienen que hacer su proceso; pero habría que ver si hay algo más claro. Que él sea el único responsable no creemos mucho que sea único responsable de la muerte o podría ser que tenga alguna responsabilidad indirecta por las circunstancias en que se dieron; pero para nosotros el asesino tiene que ser una persona experta, muy sofisticado el trabajo que hizo, y por eso pienso que es bueno pedir que sigan investigando más a fondo”, expresó el líder religioso tras participar en la misa patronal de San Antonio del Monte.
Monseñor señaló que el detenido era evangelizador a tiempo completo en el lugar y amigo del padre Cecilio. Además confirmó que el día del hecho, se habría quedado a dormir en la casa parroquial.
Señaló que como evangelizador dependen de una organización no gubernamental con sede en San Salvador, de la cual no precisó nombre.
“Él ese día se quedó a dormir, dice que le pidió permiso al padre Cecilio, por no viajar desde la casa tan temprano, abrir y repicar a las 5:00 de la mañana; es lógico hasta ahí. Lo ilógico es que no oyó nada, no vio nada, no ladró la perrita, no hay
Cuando la Policía procesó la escena del crimen encontraron una nota que decía “No pagó la renta MS-13”, algo que despertó la atención de las autoridades ya que no es común que miembros de pandilla dejen este tipo de mensaje tras un asesinato.
Además porque el sacerdote no había comentado sobre posibles amenazas.