Aquel que alguna vez haya visitado el mercado San Miguelito más de alguna de vez habrá notado que entre verduras y flores caminaba Canelo: un perro aguacatero de 12 años, quien fue adoptado por los vigilantes de una empresa privada del referido lugar.
Aunque al preguntarle a los guardias, ellos aseguran que Canelo no es de nadie, es del “San Miguelito”, dicen entre risas.
Según explicaron, el peludo llegó cuando era un cachorro y al ver que los vendedores y clientes le dan comida decidió hacer del mercado su hogar.

Eso sí, Canelo no se quedaba atrás y acompañaba en las rondas nocturnas a los vigilantes. Tras el incendio en el mercado, él se asustó y fue uno de los primeros en salir del recinto, comentaron varias vendedoras, mientras le hacian caricias.
El perro se escabulló entre bomberos, vendedores y socorristas y, no apareció en todo el día. Fue hasta la mañana siguiente que fue encontrado dormido en un portón. “Venite, no entrés ahí porque ya no hay nada”, le repetían al can, quien con una mirada perdida miraba adentro del mercado.
Ahora Canelo camina entre escombros, aunque se limita a dormir a las afueras de los portones.