Beatriz Rivas no logra sobreponerse a la muerte de su esposo, Jeremías Ramos, quien trabajó por más de 20 años como anestesiólogo en el Hospital Rosales. El profesional de la salud murió el pasado 14 de julio de 2020, después de pasar más de una semana hospitalizado por COVID-19.
Para Beatriz, el 2 de noviembre es un día para recordar a un “buen médico, padre y esposo”. Sin embargo, a diferencia de la mayoría de familias que llevan flores a sus seres queridos a las tumbas, ella prefiere quedarse en casa, con sus dos hijos, viendo fotografías de los momentos cuando el profesional de salud seguía con vida. “Estábamos por cumplir nuestra boda de plata”, dice, entre lamento y nostalgia.
ESPECIAL Son héroes de blanco, pero también víctimas
El próximo 26 de noviembre, la pareja de esposos tenía previsto celebrar sus 25 años de matrimonio. Beatriz relata que cada año, festejaban el aniversario viajando hacia las montañas para acampar, en un lugar donde se desconectaban de sus dispositivos tecnológicos y disfrutaban el tener la oportunidad de estar juntos.
“Él casi nunca tenía tiempo libre”, comenta Beatriz, enfatizando que su esposo trabajaba largas jornadas dentro del Hospital. Sin embargo, comenta que cuando tenían tiempo libre lo “disfrutaban al máximo”.
Beatriz recuerda las veces que ella le cocinaba y se trasladaba al Hospital Rosales para llevarle el almuerzo a Nehemias. “Él salía al encuentro. Siempre sonriendo, mi seco amado”, recuerda.
Podrías leer: Muere médico pionero en aplicar anestesia total endovenosa
Dentro del Hospital Rosales, los trabajadores de salud han colocado un retrato del anestesiólogo como una forma de seguir recordando a un gran compañero y amigo. “Justo en ese lugar donde me recibía, me siento feliz de encontrar su fotografía”, expresa Beatriz.
Por otra parte, la esposa del anestesiólogo relata que su situación económica se ha visto afectada. Sin embargo, algunos médicos y enfermeras del Hospital Rosales han realizado una colecta entre todos para ayudar a solventar algunos gastos que se han acumulado desde la muerte del profesional de salud.
Beatriz dice sentirse agradecida por el apoyo que muchas personas le han mostrado durante los cuatro meses, desde fallecimiento de su esposo.
El 14 de julio, Día Nacional del Médico, Jeremías Ramos falleció. Los amigos y familiares lo recuerdan como un hombre comprometido en ayudar a los demás. Beatriz describe a su esposo como una persona muy empática, solidaria y dispuesto a dar hasta de lo que no tenía.
“El Estado tiene la obligación de responder a las familias de los trabajadores de salud fallecidos”