Óscar Guzmán: el profesor que vende sorbetes para pagar la carrera en medicina de su hija

Con su trabajo en las calles de San Juan Opico, Óscar Guzmán tiene el sueño de cumplir el sueño de su hija: convertirse en doctora en medicina.

Con su trabajo en las calles de San Juan Opico, Óscar Guzmán tiene el sueño de cumplir el sueño de su hija: convertirse en doctora en medicina. Video EDH / Nohemí Ángel

Por Nohemí Ángel

2021-10-05 8:54:39

Oscar Guzmán es profesor de informática en un colegio privado del municipio de San Juan Opico. Debido a la complicada situación económica, generada por la cuarentena del año pasado, tuvo que buscar la manera de salir adelante y ahora se dedica a la venta de sorbetes artesanales.

Según Oscar, está cerca de cumplir un año de dedicarse a ambos trabajos: el primero como docente, en el turno de la mañana; y el segundo, como vendedor de sorbetes en el parque central de San Juan Opico, por la tarde.

Como él mismo expresa, la principal razón por la cual tiene dos empleos es para sacar adelante a su familia y ayudar a sus hijos a alcanzar sus sueños, el más cercano: que una de sus hijas complete la carrera de medicina.

Trabajo en equipo

Rosa de Guzmán, esposa de Oscar, es clave importante para alcanzar los objetivos que, como padres, comparten. Ella aporta su grano de arena a la causa, al salir, junto a su esposo, a vender los sorbetes.

Además, Rosa se organiza para realizar trabajos de bordados a mano y de esta manera obtener pequeños ingresos. Aunque ha considerado irse del país para buscar un futuro mejor para su familia, declara no sentirse convencido. “Yo siento que eso sería como romper el matrimonio”, dice.

Un sueño pausado

Los problemas económicos, la pandemia y la ubicación geográfica son solo algunos de los impedimentos que Óscar y su esposa tienen que afrontar para que su hija mayor cumpla el sueño de culminar su carrera académica.

Óscar explica la forma en la que él y su hija compartían los recursos tecnológicos para dar clases y recibirlas: “tuve que prestar un dinero para comprar una laptop usada para dar mis clases y a veces ella (su hija) tiene que utilizar la misma laptop porque no tenemos otro dispositivo”, confirma.

De momento, la hija de Óscar ha pausado sus estudios y ha optado por tomar cursos técnicos para emprendedores, con el claro objetivo de ayudar a su familia a salir adelante y, luego, quizá, retomar su carrera.

“Nos hacen falta algunos (recursos) para poder seguir adelante y tener mejores oportunidades”, concluye Óscar.