Después de cinco meses, El Salvador vuelve a registrar el 6 de enero más de 300 casos nuevos de COVID-19. La cifra es similar a la del 17 agosto 2020, uno de los meses más críticos del primer brote de la pandemia, y en ese mes el pico más alto de casos detectados fue 449.
La diferencia de los registros de ese periodo con el actual es que el promedio de muertes diaria es de 8 al día y en agosto fue de 15.
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Ante ese escenario, el personal de sanidad pide al Ministerio de Salud aplique con el Decreto Legislativo 774, el cual es una Disposición Transitoria que protege a los trabajadores con condición médica vulnerable frente al COVID-19 ha ser resguardados y realizar teletrabajo desde sus domicilios.
Según lo aprobado por la Asamblea Legislativa y vigente desde le 1 de enero de 2020, el mandato tiene por objetivo proteger a los trabajadores, públicos y del sector privado, además de garantizar la estabilidad laboral y la remuneración.
La ley beneficia a personas mayores de 60 años con enfermedades crónicas, mujeres con embarazo de alto riesgo, empleados con obesidad mórbida, personas diagnosticadas y en tratamiento contra cáncer, empleados con enfermedades graves o con trasplantes y personal convaleciente de COVID-19 en su primer mes de recuperación.
Sindicatos y trabajadores de sanidad indicaron a El Diario de Hoy que esta normativa no se está cumpliendo en el Ministerio de Salud (Minsal) debido a que es el personal de primera línea y de realizarse a cabalidad esta disposición solo habría un 50 % de trabajadores dando atención durante la pandemia; lo cual no es funcional ante la demanda de servicios y el incremento de casos a nivel nacional.
Sin embargo se deben tomar medidas para evitar que más personal de salud se contagie y fallezca, manifestó la secretaria general de Sitrasalud, Silvia Navarrete.
“Tenemos casos en los que hay gente con problemas de salud que podrían llevarlos incluso hasta la muerte por estar expuestos al virus, este personal está siendo mandado a áreas de IRAS, que es el primer lugar donde llegan las personas con síntomas de enfermedad respiratorias y con sospecha de COVID-19. Nosotros estamos esperando la respuesta del ministerio sobre los lineamientos para apegarse a este decreto”, dijo Navarrete.
La sindicalista señaló que no están de acuerdo con disposiciones del Minsal, como la que descuenta los días de resguardo de los 90 días por enfermedad, con goce de sueldo, a los que les da derecho la ley.
Agregó que a nivel de clínicas y área médica, los casos de contagio de personal de salud está en aumento, “las prácticas de no cumplir el resguardo y poner a trabajar al personal de salud contagiado por COVID-19, aumenta el riesgo de muerte en los trabajadores, y aumenta el riesgo de los pacientes”, expresó.
Según declaraciones del ministro de Salud, Francisco Alabí, hay 46 médicos fallecidos y más de 215 muertes de empleados de salud a causa del virus, tanto en el área pública y privada.
El funcionario de salud justificó que el contagio del personal de salud no se dio precisamente en el área de atención, “la manera de contagio es estar expuesto ante una persona con la enfermedad y eso no necesariamente va suceder cuando estamos en el hospital. Ante un país donde hay circulación activa, uno puede adquirir la enfermedad en cualquier lugar”, alegó.
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Ante el alza de casos nuevos por el virus, el medico salubrista y candidato a diputado, Ricardo Lara, exhorta a sus colegas para que exijan el fiel cumplimiento del decreto.
“En este momento, que estamos en inminente peligro por riesgo de contagio, a raíz que en el país se ha confidencializado la información con respecto al número de casos que se están dando y que la persona pueda saber que son positivas, me parece que es oportuno que se apeguen a este decreto. Y exhorto a los trabajadores a que no se sientan intimidados si no les van a respetar el derecho de protegerse ante la grave situación que se está viviendo, dado que el nivel de contagio está incontrolable ”, señaló.
Hasta el día el miércoles, los casos acumulados positivos al virus era de 47,948, de los cuales 1,390 han fallecidos. Y hay 3,890 casos activos, según datos del pronóstico de pacientes: 93 están en estado crítico, 470 en estado grave 999 moderado y 1087 asintomáticos.