“La vacuna es santo remedio y me dio hambre. ¡Una mujer me quería comer! (ríe a carcajadas). La vacuna es buena”, dice María del Carmen Cardoza de 96 años. Su comentario tiene un tras fondo serio, aunque va aderezado con el buen humor que la caracteriza.
Doña Carmelina, como es popularmente conocida, fue una de las 64 personas que se encuentran en el Hogar de Ancianos Llanos Magaña, en Ahuachapán, y que recibieron la vacuna anticovid.
Actualmente las jornadas de vacunación en el país están enfocadas en población a partir de los 60 años de edad; y en el caso de las personas en los asilos han tenido atención especial.
Con la misma alegría que desbordan doña Carmelina dice sentirse más tranquila tras recibir la primera dosis. Ella es oriunda de Metapán y se encuentra desde hace siete años en el Hogar, luego que vecinos la llevaran para internarla ya que no cuenta con familia.
Recibir la vacuna ha llenado esperanza al grupo de ancianos del asilo, quienes han visto reducidas las visitas en el contexto de la pandemia y como medida de protección para ellos, al ser tan vulnerables al nuevo virus.
Elba del Carmen Reinoza, de 73 años, se encuentra en el Hogar desde finales de diciembre del año pasado. Una ex cuñada le había dado donde vivir porque no tiene familia.
“Doy gracias a Dios porque en realidad nos sentimos más seguras, como con más confianza”, manifiesta doña Elba, en un tono lleno de seriedad.
A las personas de la tercera edad las vacunaron en las instalaciones del Hogar; mientras que dieciséis miembros del personal administrativo fueron citados, el mes pasado, a la Unidad de Salud de la cabecera departamental para recibir la primera dosis .
En total han recibido la vacuna anticovid 80 personas del Hogar, entre el personal administrativo y las personas de la tercera edad, que en su mayoría no cuenta con familiares.
La directora, sor Elsa Gloria González, expresó que únicamente tres personas presentaron temperatura y enfermedad estomacal, presume, como parte de la reacción tras la vacunación.
Haber recibido la vacuna “representa seguridad para cada uno de los que aquí nos encontramos. Primero seguridad y segundo es como un privilegio haber tenido este beneficio acá en la institución porque nos pudieron haber dicho que los lleváramos al Seguro Social o a otro lugar, cosa que hubiera sido bien complicado”, expresó la directora de la entidad.
La institución mantiene medidas de bioseguridad para evitar posibles contagios; incluso, las visitas han sido restringidas a media hora y en el área de portería. Los visitantes deben de estar a una distancia prudencial.
El Hogar subsiste principalmente de ayudas altruistas, por lo que toda donación es bien recibida.
El gobierno, a través del Ministerio de Salud, cancela el sueldo de dieciséis empleados y el pago de energía eléctrica. En este último reciben una factura de más de $700 al mes; además, los rubros de aguinaldo, vacaciones e indemnizaciones deben ser cubiertos por el Hogar.
A eso se suma que cubren los gastos de alimentación de las personas de la tercera edad, medicamentos y artículos de limpieza, entre otros rubros.
Para recolectar fondos que ayuden a la administración del lugar, el miércoles 21 de abril se realizará un evento de evangelización, donde habrá misa, Hora Santa y oración de sanación.
La actividad será en la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe a partir de las 4:00 de la tarde. La colaboración es de dos dólares.
La jornada será presidida por el padre Armando López, quien llegará desde Estados Unidos.