El entierro de la estudiante de 13 años, que fue encontrada asesinada en Ciudad Delgado fue corto y sin la presencia de sus compañeros de estudio.
La familia prefirió enterrar a la adolescente lejos de donde se supone que vivían en la parte norte de San Salvador por temor a represalias, según lo revelaron conocidos de la familia.
El único avance que las autoridades de la Policía han revelado hasta ayer fue la localización del vehículo donde se supone trasladaron a la joven para luego dejar su cadáver abandonado en una desolada calle polvosa en la colonia Rivera, en el kilómetro 11.5 de la carretera
Troncal del Norte, en Ciudad Delgado.
El director de la Policía, Howard Cotto, detalló que el vehículo está a nombre de una persona que a su vez es dueña de otros diez más, pero que no tiene antecedentes delictivos. Tampoco el vehículo tenía reporte de robo o hurto.
Los investigadores indagan si el propietario del carro era quien conducía en el tiempo que movilizaron a la estudiante al lugar donde fue raptada hacia donde fue encontrada muerta.
Cotto agregó que también indagan la posible vinculación del ataque de la estudiante en Ciudad Delgado con un doble homicidio que ocurrió dos días antes en la calle a San Luis Mariona, en el municipio de Cuscatancingo. Un adolescente y una joven, ambos de 17 años, fueron las víctimas.
Las estadísticas del Instituto de Medicina Legal (IML) revelan que en 2018 , un total de 24 estudiantes fueron asesinados en todo el país. De ese número, sólo dos fueron asesinados con objetos contundentes y los demás, con arma de fuego.
Las cifras establecen que de las 24 víctimas, sólo cuatro fueron señoritas.