El Ejército decomisó este martes armas de fuego y granadas a un grupo de al menos 15 pandilleros, quienes huyeron tras atacar a balazos a los militares, informó el Ministerio de la Defensa.
Los delincuentes de la pandilla 18 Sureños tenían un campamento improvisado en la zona de La Cañada, Puerto el Triunfo, Usulután. Ahí, las autoridades encontraron dos armas largas, dos pistolas, tres granadas M-67, una carabina 30/30, una UZI, seis cargadores para fusil M-16 y un chaleco antibalas que pertenece a la Policía Nacional Civil (PNC).
La fuente castrense añadió que los pandilleros también tenían hamacas y objetos para preparar sus alimentos.
Según el director de la PNC, Howard Cotto, las pandillas utilizan fusiles de guerra que “podrían venir del tráfico internacional de armas” y otros que son “remanentes del conflicto armado” que el país vivió entre 1980 y 1992.
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Por su parte, el ministro de la Defensa, David Munguía Payés, considera que El Salvador enfrenta un conflicto armado de “baja intensidad” por los constantes enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y las estructuras de pandillas, que también atacan a los uniformados en sus días libres.
En el lugar se encontraban aproximadamente 15 delincuentes de la pandilla 18 sureños, quienes contaban con hamacas e implementos para elaborar su alimentación. pic.twitter.com/dg7euccmpO
— FUERZA ARMADA (@FUERZARMADASV) February 19, 2019
La Policía y el Ejército decomisaron en 2018 un total de 3,683 armas de fuego, de las que 2,516 eran pistolas y 540 fusiles de guerra, entre otras, con lo que el promedio diario de decomiso fue de 10.
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