La cuenta regresiva ha comenzado para que el Arzobispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero pase a los altares de la Iglesia Católica en la ceremonia que presidirá el papa Francisco la mañana de este domingo en la Plaza de San Pedro y que concelebrarán centenares de sacerdotes salvadoreños llegados desde el terruño y de otras partes del mundo.
Pero como muestra de la antesala del acontecimiento, desde el viernes la Plaza ya está seccionada con los bloques de sillas que servirán para acomodar a los millares de peregrinos, no solo salvadoreños sino de otras partes del mundo que han llegado.
Desde la Plaza de San Pedro, en el Vaticano, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, envió este 13 de octubre un mensaje en la víspera de la canonización de Monseñor Romero. Video: @arzobispadoss
En el frontispicio de la Basílica lucía desde este viernes, entre los gigantescos afiches de los futuros santos, una imagen del Arzobispo salvadoreño asesinado en 1980 mientras oficiaba misa en la capilla del Hospital La Divina Providencia, en San Salvador.
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Y este viernes aparecieron en la Plaza de San Pedro grupos de peregrinos listos para participar en la ceremonia de canonización de Romero.
La tarde de este viernes el Vaticano realizó un foro sobre la figura del Obispo Mártir salvadoreño.
En uno de los pasillos centrales que acordonados que dividen los bloques de sillas estaba admirando las fachadas y los arcos de la Basílica de San Pedro un grupo familiar salvadoreño originario de Sonsonate y que reside en Los Ángeles, que se encontró con el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, que atravesaba también a esa hora la extensa Plaza.
“Hemos venido de Los Ángeles, vivimos en el valle de San Fernando y es una dicha estar aquí para presenciar este grandioso evento que nos llena de orgullo a los salvadoreños”, declara Wilfredo Villanueva, uno de los miembros del grupo.
El cortometraje animado en plastilina en homenaje a Moseñor Romero
Con la dirección del español Ferran Caún, la Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas", produjo este cortometraje animado en plastilina para rendir homenaje al primer santo salvadoreño. Cortesía UCA.
Ellos son parte de los aproximados 7 mil salvadoreños que se registraron en el arzobispado para participar en el acontecimiento que incluye además de la ceremonia de este domingo una serie de actividades alusivas a la vida y obra de Romero.
Los salvadoreños llegados han dado color a las calles de Roma, donde no ha sido sorpresa encontrar a grupos de connacionales listos para participar en esta fiesta histórica.
El arzobispo Escobar Alas comenta que después de un largo tiempo con vaivenes ha llegado un día de gran celebración con el asenso de Monseñor Romero a los altares.
“Estamos celebrando que Monseñor Óscar Arnulfo Romero es el santo de El Salvador y lo será para la historia de nuestro país. Es un santo que traspasa nuestras fronteras hacia América Latina y al mundo. ¿Por qué su grandiosidad? Creo que por su radicalidad en la vivencia del Evangelio”, comenta el arzobispo capitalino luego del saludo casual con los compatriotas peregrinos.
Mientras ultiman detalles en la logística y se restringes áreas de circulación por la Plaza, el azul y blanco de los salvadoreños se luce por las callejuelas de Roma, algunas empedradas que dan un toque de antaño con edificios de la modernidad, escondidos en muros de piedra de construcciones tan antiguas como la misma Roma. Entre todo este devenir los salvadoreños llevando su bandera, especialmente los grupos que viajan en delegaciones han aprovechado para hacer sus fotografías en los sitios insignes de Roma luciendo la Bandera de El Salvador.