A 67 días para que termine oficialmente el año escolar el Ministerio de Educación (Mined) no termina de transferir a las escuelas los fondos correspondientes al presupuesto de operación y funcionamiento, según confirmaron al cierre de la semana pasada los directores de varias escuelas públicas.
“Ahorita no tenemos presupuesto ni para comprar banderas, ni ambientar para el mes de septiembre (con motivo de la fiesta de Independencia), tampoco para comprar material de limpieza, plumones de los maestros, papelería para la escuela, tinta (de las impresoras), para el pago del instructor de la banda de paz y pagar mensualmente los recibos que vienen”, aseguró David Rodríguez, director interino del Centro Escolar Profesor José Luis Ernesto Sánchez, de La Libertad.
Rodríguez detalló que de los $2,547 de presupuesto de operación que les correspondería recibir este año, solo han recibido dos desembolsos: uno de $403 y el otro de $169, que totalizan $572 dólares, monto que en su mayoría tuvieron que invertir en el pago de recibos de electricidad que tenían pendientes.
En esta institución cuentan con nueve docentes, quienes se encargan de atender la educación de 201 estudiantes.
“Como escuela nos deberían haber dado ya a estas alturas, por lo menos el 50 % del presupuesto”, afirmó el educador, quien sostiene que han tenido que recurrir a la colaboración de los padres de familia y de la alcaldía de la localidad para salir adelante con las actividades que el Mined ha programado para el mes cívico.
En el Centro Escolar Anselma Sánchez de Mancía, ubicado en el Congo, Santa Ana, el director Óscar Martínez, explicó que hasta la fecha en lo que respecta a los fondos de funcionamiento, el Mined les ha hecho dos depósitos que suman $1,200; pero les adeudan una segunda transferencia de $1,000.
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Martínez sostiene que en su escuela atienden 550 estudiantes desde parvularia hasta bachillerato y todavía tienen muchas necesidades por cubrir relacionadas con material didáctico, el mantenimiento de computadoras e impresoras, reparaciones menores de las instalaciones, medicinas para el botiquín escolar y utensilios de limpieza para mantener ambientes saludables.
“Como el dinero llega tarde y muy limitado las escuelas nos vemos en la obligación de realizar actividades económicas. No las podemos dejar de hacer. Uno no quisiera (hacerlas) porque se recarga al padre de familia la responsabilidad que tiene el Estado de dar la educación gratuita y de calidad. No hay ni una (escuela) que no vaya a decir que no hace actividades con aval de los padres de familia y eso, de alguna manera, ayuda a resolver la insuficiencia de fondos tardíos”, subrayó el director.
La historia en el retraso de asignación de fondos por parte de Educación se repite en el Centro Escolar Comunidad Planes de Mariona, de San Salvador.
El profesor Francisco Zelada, director de dicha institución – en donde se atiende a 187 alumnos – manifestó que han recibido $750 dólares de presupuesto de funcionamiento y aún están pendientes de que les transfieran otra cifra similar.
“Con lo que hemos recibido hemos podido comprar un poquito de material didáctico, pagar algunos recibos de agua potable y de energía eléctrica y pagar mantenimiento en algunas áreas del centro educativo. Nos falta cubrir más material didáctico, la totalidad de recibos de agua y energía eléctrica. Ya tenemos atrasado el pago de agua potable en tres meses y un mes de energía eléctrica y, además, reparar la bomba de la cisterna”, afirmó.
Zelada teme que les corten los servicios de agua y energía eléctrica, como les ocurrió a principios de este año, cuando se vieron forzados a pagar la reconexión.
El Centro Escolar Montecarmelo de la jurisdicción de Cuscatancingo, siempre en San Salvador, reportan que solo les han depositado $300 dólares de los $1,200 de presupuesto de funcionamiento que tienen asignado.
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“De lo que nos dieron de asignación de funcionamiento se fueron $208 dólares en material, más la semana cívica ahí se fueron más de $300 (dólares). No solvento nada”, lamentó Saúl Rosales, director de la institución que cuenta con 425 estudiantes en dos turnos.
El educador detalló que no tienen fondos para comprar los insumos que se utilizan para limpiar las instalaciones, para dar mantenimiento a la infraestructura escolar, al equipo de oficina, y mucho menos para comprar los accesorios para el salón de informática.
Rosales, al igual que sus colegas, lamenta que les asignen los fondos de forma tardía porque esto les crea un desfase en el cumplimiento de sus compromisos con proveedores y en los proyectos educativos que planifican a inicios de año lectivo.