Más de 38 voluntarios se dieron cita en la desembocadura del río Lempa para recoger los desechos plásticos que amenazan a las especies del lugar.
Durante la actividad lograron la recolección de 521 libras de plástico en sus diferentes variantes. 281 libras de botellas, 31 libras de tapas de polipropileno y 209 libras de desechos varios, entre caucho, trozos de redes, boyas, polietileno expandido, vidrio y calzado.
La limpieza se ejecutó el pasado 30 de junio y se realizó en tres puntos específicos dentro de un área de 300 metros. En el recorrido se movilizaron los voluntarios en 4 lanchas desde la Puntilla y Costa del Sol en un recorrido de 9.7 kilómetros por los manglares del sitio RAMSAR Complejo Jaltepeque, hasta llegar al punto de recolección.
Foto/cortesía David Alfaro
Con duración de una hora y media, los voluntarios dedicaron todo su esfuerzo por limpiar el río más importante del país, que abastece de agua a casi todo el territorio. El río Lempa cruza tres naciones: Guatemala, Honduras y El Salvador.
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La limpieza fue organizada por Denim Proyect, David Alfaro, Asociación Océano y Un Pulmón Más, con el fin de reducir los niveles de contaminación de la zona, contribuir al cuido de especies locales y concientizar sobre la importancia que representa el cuido del medio ambiente.
A la actividad también se sumaron los pescadores artesanales de la Isla Tasajera, quienes brindaron su apoyo para ayudar en la problemática que viven día a día con la contaminación de plástico que llega a sus riberas.
El tiempo de degradación del plástico depende de las condiciones ambientales a las que se expone (luz solar, oxígeno o agentes mecánicos). Puede tardar entre 400 a mil años en degradarse. El plástico enseguida comienza a fragmentarse en partículas cada más pequeñas, capaces de ser transportadas a grandes distancias por el viento y el agua.
El material encontrado fue trasladado a la costa, clasificado, pesado y entregado a la empresa recicladora Parque Industrial Verde, para su tratamiento.