En la sesión de instalación de la recién inaugurada legislatura 2018-2021, los diputados eligieron a los nuevos integrantes de la Junta Directiva del parlamento salvadoreño. Los diputados acordaron que, durante la primera mitad del periodo, Norman Quijano, de ARENA, será el Presidente de la Asamblea Legislativa. En el año y medio restante será Mario Ponce, del PCN, quien ejercerá la presidencia.
Desde mayo de 2018 hasta octubre de 2019, los vicepresidentes serán: José Serafín Orantes, del PCN; Guillermo Gallegos, de GANA; Yanci Urbina, del FMLN y Alberto Romero, de ARENA. Para el mismo periodo, resultaron electos como secretarios: Francisco Merino, del PCN; Rodolfo Parker, del PDC; Cristina Cornejo, del FMLN; Patricia Valdivieso, de ARENA; Numan Salgado, de GANA y Mario Marroquín, de ARENA.
Para la segunda mitad de la legislatura los vicepresidentes serán: Norman Quijano; Guillermo Gallegos, de GANA; Yanci Urbina, del FMLN y Alberto Romero, de ARENA. Para esta segunda fase, asumirán Reynaldo Cardoza, del PCN; Rodolfo Parker, del PDC; Cristina Cornejo, del FMLN; Patricia Valdivieso, de ARENA; Lorenzo Rivas Echeverría, de GANA y Mario Marroquín, de ARENA.
Norman Quijano electo como presidente de la Asamblea Legislativa
Este día se conoció cómo quedará establecida la Asamblea Legislativa para el período 2018-2021
Aunque la sociedad civil clamó por una reducción de directivos, solo hubo una disminución de dos miembros, pasando de una Junta de 14 a una de 12 integrantes. Independientemente del tamaño final del organismo director del primer órgano del Estado, este enfrenta cinco grandes retos. ¿Cuáles son estos retos?
1.Ser más transparente
Aunque la unidad de acceso a la información de la Asamblea ha atendido múltiples solicitudes de este medio de comunicación, cuando se solicitaron los documentos que comprobaran la aplicación de descuentos a diputados por inasistencias, la misma remitió un enlace vacio, donde no estaba lo solicitado. También, instituciones como el Centro de Asesoría Legal Anticorrupción (ALAC-FUNDE) han luchado para que la Asamblea cumpla con la obligación de dar datos en formatos procesables (datos abiertos).
2. Lograr mejores resultados de sus viajes al extranjero
Que los diputados viajen representando al país no es malo, por el contrario, puede ser algo positivo. Pero, la población señala en redes sociales la necesidad de limitar la cantidad y procurar hacer solo aquellos viajes que puedan traer beneficios reales para el país. Coronar una reina no es uno de ellos.
Foto/ Jessica Orellana
3. Promover leyes que realmente beneficien a la población
Los legisladores deben centrarse en el trabajo sustantivo y no en la declaración de días de asueto o fechas conmemorativas. Múltiples analistas han señalado que se debe fortalecer el sistema legal en materia de lucha contra la corrupción, también en la búsqueda de la estabilidad fiscal, así como en la reducción de la tramitología gubernamental.
La alfombra roja de la Asamblea Legislativa
Diputados y diputadas posaron para las cámaras durante su llegada a la primera plenaria del período 2018-2021.
4. Asistir puntual y diligentemente a sus obligaciones como legisladores
El servicio público demanda un comportamiento ejemplar, por lo que la población pide a sus representantes que cumplan sus jornadas de trabajo, asistencia a comisiones y plenarias. Mucho se ha pedido que se aplique el reglamento a aquellos diputados que, sin justificación, dejan de asistir a plenarias. Hasta hoy, las autoridades legislativas siguen sin hacer cumplir el reglamento interno del parlamento.
5. Reducir los privilegios
Organizaciones tales como la fundación Democracia, Transparencia y Justicia (DTJ) han reclamado públicamente reducir la cantidad de directivos del parlamento. La sociedad clama por la eliminación de privilegios y exhorta a los diputados a dar ejemplo de austeridad.