La ayuda económica para jóvenes que ni estudian ni trabajan (conocidos como “ninis”), anunciada el presidente Salvador Sánchez Cerén, ha generado más contradicciones que respuestas entre distintos funcionarios del Gobierno.
Las incongruencias van desde el financiamiento del programa, hasta la concepción del mismo, pues aseguran que se trata de un aporte y no de un subsidio para los jóvenes considerados “nini”, tal como lo anunció el mandatario el pasado martes.
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El ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, sostuvo ayer que el plan denominado “JóvenES” con todo, que incluye ayudas económicas a jóvenes para emprendedurismo, será financiado con la contribución especial a la telefonía del 5%, el cual fue creado para combate a la seguridad; no obstante, la directora del Instituto Nacional de Juventud (INJUVE), Yeimi Muñoz, aclaró horas más tarde que el programa sería financiado por un préstamo por $130 millones con el Banco Mundial, además de aportes del Fondo General de la Nación.
Pero el dirigente del FMLN, José Luis Merino, afirmó que arrancarán el programa con dinero del impuesto a la telefonía y matizó que “posiblemente” a lo que se refiere Muñoz cuando habla del préstamo es para darle “continuidad a largo plazo al programa, para darle sostenibilidad no sé cuántos años más”.
Otra de las contradicciones es que la directora del INJUVE criticó a los medios de comunicación y algunos sectores por “estigmatizar” a los jóvenes al considerárseles “ninis”. Sin embargo, el mismo Cáceres se refirió durante la mañana de ayer a los jóvenes precisamente con esa descripción.
“El dinero (de contribución especial) era para prevención. Qué significa la prevención, que estos ninis que ni estudian ni hacen nada y que son vagos ahora se dediquen a estudiar y a trabajar, eso es lo que se quiere”, acotó el titular de Hacienda.
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En tanto, la directora de INJUVE exigió: “Rechazamos todo tipo de estigmatización y discriminación a la juventud salvadoreña. Estoy convencida que los jóvenes necesitan el apoyo de toda la sociedad”.
Por su parte, el secretario de comunicaciones de la Presidencia, Eugenio Chicas, deslindó al gobierno del término “nini” y argumentó que este fue acuñado por una ONG. Esto a pesar de que el presidente Sánchez Cerén aseguró que el programa iba destinado a jóvenes que no trabajan o no estudian.
“Oigan bien padres y madres de familia: aquí tienen una oportunidad. Si su hijo no estudia o no trabaja pues este programa le va a dar un apoyo en dinero por 12 meses para que este joven pueda tener formación. Si tiene formación enviarlo a pasantías, que trabaje. Y además trabajar por el primer empleo y la intermediación laboral y el emprendimiento”, señaló el mandatario el pasado martes.
Pero Muñoz negó que se trate de un subsidio a jóvenes, sino de un “aporte” para que pueden pagar su alimentación y transporte cuando estudien o trabajen. Dijo que, hasta el momento, el monto que han otorgado a jóvenes es de $30 mensuales.
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“En ningún momento hemos hablado de bono o de subsidio, hemos dicho un aporte para que el joven pueda movilizarse y para que se alimenten en los procesos de formación. Los jóvenes que están en la sede de Soyapango han tenido un aporte de $30 mensuales”, acotó.
Y Merino explicó que en el programa participarán los padres de familia, los pastores evangélicos, los maestros para que en cada barrio y colonia que se haya escogido reciban el apoyo para que vayan a estudiar. “Entiendo que cuadrarán con los institutos y las universidades para que los cipotes vayan a estudiar”, dijo.
Chicas, por su parte, defendió que el dinero de la contribución especial a la telefonía sea utilizado, pues asegura que el componente de la prevención está integrado en el Plan El Salvador Seguro. Por ello, señaló, no cree que haya alguna demanda de inconstitucionalidad por el uso de los fondos para entregar dinero a los “ninis”.
“Programas de esta naturaleza se inscriben dentro del gran esfuerzo nacional por la prevención, por lo tanto están revestidos de toda la legalidad con la que se diseñaron los usos de esos fondos que es una herramienta para el rol de prevención para salvaguardar al a juventud”, manifestó.
Según dijo, tratarán de convencer a todas las bancadas legislativas de oposición para que den sus votos por el préstamo para el programa, el cual necesita de 56 votos. Aseguró que ningún partido se debe poner a este tipo de planes.
Y llamó a las distintas fuerzas sociales y políticas para que apoyen el programa. “Nuestro punto de vista como gobierno es a los partidos, a las fuerzas sociales: no le tengamos miedo a la juventud, apoyemos a la juventud. Invito a la oposición: unámonos por la juventud. Le ofrecemos a la oposición toda la información sobre estos programas. Estos son programas de país”, dijo Chicas.
Eso sí, señaló que hay voces que no critican por desconocimiento del programa, sino por el hecho de oponerse.
“Hay suficiente filtros”
La directora de INJUVE sostuvo que existen los suficientes filtros para evitar que miembros de pandillas o personas afines al partido de gobierno se beneficien del programa de ayuda a jóvenes.
“El programa tiene una convocatoria pública. Todos los jóvenes que llegan al programa, si son jóvenes entre 15 y 29 años, si viven en el municipio, son sujetos a la primera inscripción, donde nosotros verificamos si cumplen el resto de requisitos que establece la ficha y, por supuesto, ellos clasifican”, explicó.
Y afirmó que no se trata de un plan de reinserción para jóvenes que hayan delinquido, sino que se busca invertir en la juventud para que tengan más oportunidades.
“Este no es un programa de reinserción. Hay un proyecto de ley que se discute en la Asamblea Legislativa que tiene la vía de la reinserción de jóvenes pertenecientes a pandillas; este es un programa de inversión para la juventudes del país, para todas las juventudes”, declaró.
De acuerdo con Muñoz, el programa “JóvenES con todo” ofrece a las juventudes un apoyo que les sirve para transporte y alimentación, con miras a que puedan llegar hasta los procesos de formación.
La directora de INJUVE aseguró que, para este año, se espera beneficiar a un promedio de 3,000 jóvenes, para lo cual abrirán otras cuatro oficinas en otros departamentos.
Además dijo que el programa no es nuevo, sino que es producto de una amplia consulta nacional, sectorial y territorial que el INJUVE inició en mayo de 2015, “y que nos ha permitido poder implementar el programa en su primera fase. Busca promover competencias de nuestra juventud para que se incorporen al trabajo y al mundo productivo”.
Explicó que para darle seguimiento a la formación de los jóvenes, tendrán tutores que estarán pendientes de su proceso.