¿Por qué el coronavirus ataca más a hombres que a mujeres?

En China, al principio del brote la tasa de mortalidad masculina fue de 2.8 %, mientras que para las mujeres era de 1.7 %.

Por N. Hernández / Agencias

2020-03-20 3:36:30

En febrero, China llevaba un mes luchando contra el brote de coronavirus y el Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades (CCDC) hizo su primer estudio de los datos de los pacientes.

En es momento la muestra la componían 138 personas con COVID – 19 hospitalizados, el rango de edad era de 56 años y el 54.3 % eran hombres.

Semanas después, se hizo un segundo estudio más amplio, se contaba con 72,314 pacientes y las conclusiones fueron similares, el 51 % de los casos eran hombres y la tasa de mortalidad era de 2.8 % para hombres y 1.7 % para mujeres.

¿Cuál es la razón para que la población masculina sea más susceptible al contagio del COVID – 19? Es probable que los estrógenos, el principal grupo de hormonas sexuales femeninas, influyen en la pocas transmisión del virus en mujeres.

“Los estrógenos pueden estimular aspectos de la inmunidad que son importantes para eliminar una infección viral y responder bien a las vacunas”, explicó a BBC Mundo Sabra Klein, del departamento de microbiología molecular e inmunología de la Escuela de Salud Pública de la Universidad John Hopkins.

Según la experta, los estrógenos son un factor que contribuye a una mayor inmunidad en las mujeres durante el brote actual. Sin embargo, aún no hay ninguna investigación que lo haya demostrado definitivamente.

“Diversos estudios de ratones infectados con el anterior brote de coronavirus del SARS, el estrógeno definitivamente contribuyó a cómo los ratones hembras controlaron la infección mejor que sus contrapartes masculinas”, explicó la experta.

La población femenina suele tener mayor inmunidad que la masculina, incluso en infecciones virales como la gripe común y esto contribuye a que las mujeres estén más preparadas para enfrentar la epidemia.

No obstante, tampoco deben de olvidarse los factores sociales y culturales que pueden estar influyendo para que la tasa de mortalidad de los hombres sea más alta. Por ejemplo, el hábito de fumar, según los datos de The New Times, en China más del 50 % de hombres fuma en comparación con el 2 % de las mujeres y dado que el coronavirus ataca a los pulmones y provoca neumonía, fumar aumenta el riesgo de complicaciones en casos de infecciones por coronavirus.

En cuanto a los factores culturales, hay que tener en cuenta que las diferencias de género, así como los roles sociales y comportamientos pueden influir, según la doctora Austin Clayton.

Una gran diferencia de género es el porcentaje de mujeres y hombres que pasa consulta cuando están enfermos.

“Según un estudio de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, las mujeres estadounidenses tenían un 33% más de probabilidades que los hombres de acudir al médico cuando se sienten mal”, explicó Clayton.

Otro factor que influye es la susceptibilidad a enfermedades que se padecen antes de contraer el COVID – 19 y esto genera un impacto directo en la mortalidad de los hombres, además, se suma la edad del paciente.

Los hombres chinos también tienen tasas mayores de diabetes tipo 2 y la presión sanguínea más alta que las mujeres.

“En los humanos, aunque las diferencias en la inmunidad podrían ser un factor que contribuye a contestar la pregunta de por qué las tasas de mortalidad son más bajas en las mujeres que en los hombres, también podrían estar en juego enfermedades asociadas con un mayor riesgo de muerte por coronavirus”, afirma la doctora Klein.

Por ejemplo, dice, las enfermedades cardiovasculares son un factor de riesgo “asociado con peores resultados en el brote de coronavirus actual y los hombres pueden tener más enfermedades cardíacas que las mujeres en los rangos de edad en que las personas mueren”.

La investigación del CCDC asegura que alrededor del 80.9% de las infecciones del nuevo coronavirus se clasifican como leves, el 13.8% como graves y solo el 4.7% como críticas, lo que incluye insuficiencia respiratoria y multiorgánica, y shock séptico.

Pero volviendo a la inmunidad femenina, ésta puede ser un arma de doble filo porque contribuye a eliminar más rápido los microbios y a dar una respuesta más fuerte, pero también contribuye a una mayor susceptibilidad de las enfermedades inflamatorias, autoinmunes entre las mujeres.