La Policía de Palm Beach detuvo este miércoles a una mujer de nacionalidad china por invadir Mar-a-Lago, la residencia y club social del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el sur de Florida, informó la Policía local.
La mujer, identificada como Jing Lu, de 56 años, es la segunda proveniente de este país que es arrestada por ingresar de manera ilegal al resort del mandatario, quien en ese momento no se encontraba en este estado del sureste.
Agentes de esta dependencia policial acudieron a la propiedad del presidente para, junto a agentes del Servicio Secreto de EE.UU., interrogar a la mujer que traspasó el inmueble, según señaló el gerente de Mar-a-Lago, Kirk Blouin, en declaraciones que recoge el diario local Palm Beach Post.
A la mujer se le había solicitado que abandonara las instalaciones de Mar-a-Lago, por traspasar ilegalmente el perímetro de la propiedad, pero volvió para tomar fotos, tras lo cual fue detenida por la Policía de Palm Beach, según informó el portavoz de esta dependencia, Michael Ogrodnick.
El presidente tiene previsto aterrizar en el sur de Florida este viernes en la tarde para pasar las fiestas navideñas y de fin de año en su residencia de cara al Atlántico y a la que llama la “Casa Blanca de invierno”.
Al día siguiente, Trump encabezará una gala en el foro Turning Point USA, que se desarrollará en el Centro de Convenciones del Condado de Palm Beach.
Mar-a-Lago ya ha sido escenario de otro incidente de traspaso, como el que protagonizó la también ciudadana china Yujing Zhang, en marzo pasado, y por el que fue condenada a ocho meses de prisión y en la actualidad se encuentra a la espera de deportación.
El pasado 25 de noviembre, un juez federal de Estados Unidos dio a conocer la sentencia contra la mujer, que llegó en taxi a Mar-a-Lago, por ingresar al club y hacer declaraciones falsas a agentes del Servicio Secreto.
Zhang, de 33 años, había intentado ingresar a áreas de acceso restringido en Mar-a-Lago, según documentos de la corte, y durante su detención se le encontraron cinco teléfonos celulares, varias tarjetas de memoria, un computador portátil, un disco duro portátil y un artefacto capaz de detectar cámaras ocultas.