Las disputas laborales, que suelen ser situaciones cotidianas en un lugar de trabajo, tomaron otro nivel cuando una mujer “decidió” asesinar con lujo de barbarie a su colega.
El horroroso crimen ha causado más conmoción tras conocerse que la asesina es una mujer de 55 años, casada y con hijos.
Se trata de Sophie Masala quien trabajaba con su “víctima” Maryline Planche de 52 años. Ambas mujeres administraban fondos para personas discapacitadas.
Según medios internacionales las peleas y riñas entre las mujeres, pasaron de ser eventuales a ser insostenibles. Tanto que Masala desarrolló un “odio obsesivo” contra Planche y planeó su muerte.
Aunque la asesina alegó en la corte de Toulouse, al sur de Francia, que actuó en defensa propia, las investigaciones indicaron que el asesinato fue premeditado.
El día del crimen, Sophie interceptó a Maryline y la golpeó con una botella de vino provocándole la muerte. Luego la subio a su auto y la llevó a su casa. Una semana después de matarla decidió no solo la degollarla sino también cercenar su cuerpo con una sierra.
Sophie, quien deberá cumplir 27 años en prisión, decidió finalizar su crimen enterrando la cabeza de Maryline en una área verde pública. Luego metió en varias bolsas las partes desmembradas del cuerpo y las arrojó al Canal du Midi.