No importaron las súplicas de los familiares, la decisión de la compañía fue tajante y José Miguel Dau David, quien permanecía conectado al ventilador mecánico, murió a las pocas horas tras el corte de la electricidad.
Sucedió en Colombia, José Miguel necesitaba el aparato pues su sistema respiratorio se encontraba afectado por el COVID-19, pero debía facturas a la compañía de electricidad.
Ha trascendido en medios locales, que los familiares solicitaron prórroga para poder cumplir con el adeudo, pero la compañía no escuchó a la familia y sus justificaciones, esto pese a que se trataba de un caso especial.
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Luz Marina Crespo, actualmente, viuda de José Miguel, dijo que hizo falta de humanismo y consideración con el caso del abuelito, detalló “verlo morir me llenó de mucha impotencia”.
Relató que cuando llegó el empleado a cortar el servicio trató de intervenir, pero fue imposible “desesperada le dije: muchacho, yo tengo un pleito con electricaribe, déjame y busco el número de radicado; entré a buscarlo y cuando regresé ya estaba en el poste cortando la luz”.
La compañía de luz lamentó la muerte del hombre, indicando que se abstiene de cualquier comentario sobre el tema.
“Electricaribe lamenta el fallecimiento de José Miguel Dau David en la Ciudad de Santa marta y presenta sus condolencias a toda su familia. La empresa se abstiene de cualquier comentario en torno al deceseo del señor Dau”, escribió en un comunicado de la empresa.