Especialistas en vida silvestre rusos dirigen su atención al archipiélago ártico para intentar resolver una situación que ha atemorizado y a la vez maravillado a los locales: osos polares que se han mudado a la zona poblada.
No es la primera vez que osos polares llegan a las islas Novaya Zemlya. Sin embargo, la cantidad es abrumadora: más de 50 se han visto en Beluchia Guba, el pueblo más grande de este archipiélago donde hay una base militar rusa.
Durante el fin de semana, las autoridades regionales declararon estado de emergencia cuando los ejemplares salvajes, afectados por el calentamiento global, se asomaron a las casas, entraron a edificios e incluso se alimentaron de basura en las afueras del pueblo.
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— ?????? FM (@92fmru) 9 de febrero de 2019
Ante la “invasión”, los habitantes tienen temor de salir de sus casas. En las redes se han difundido numerosas fotografías y videos de los encuentros con estos animales, incluso en viviendas.
Los osos polares se han visto afectados por el calentamiento global y el deshielo del Ártico, lo que les obliga a buscar comida fuera de su ambiente natural.