Esperanza Ester Aguilar de Martínez administra una mueblería junto a sus hijas Jennifer y Laura, las carpinteras dirigen, arman y venden sus productos con los que demuestran la capacidad del género femenino en todo tipo de actividades laborales.
Sobre la carretera hacia la Ruta de las Flores en el km 71 1/2, la mueblería Las Flores resalta por verse a doña Ester Trabajando junto a sus hijas.
Foto EDH/ Menly Cortez
Las Martínez trabajan a diario en equipo para armar los muebles que ofrecen a sus clientes.
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Ester es la maestra de sus hijas, Jennifer y Laura han aprendido por iniciativa propia el oficio.
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Jennifer ayuda a su madre en anotar pedidos y a hacer cuentas durante la jornada.
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Para la familia Martínez Aguilar doña Ester es el motor que les motiva a seguir adelante, pues es un ejemplo de lucha, empoderamiento y amor por la familia.
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El trabajo diario se mezcla con las obligaciones maternas, pues Laura prepara a su hija Nuria y Rafael para llevarlos a la escuela.
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Laura es amante de las motocicletas,aprendió a manejarlas y cuando pudo compró una para poder moverse a realizar diligencias, ella se encarga de ir a dejar a la escuela a sus hijos Nuria y Rafael.
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Silvestre Martínez asegura ser uno de los admiradores más grandes de su esposa, pues afirma que ella ha sido una mujer que no ha dejado doblegarse por las adversidades de la vida.
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Mueblería las flores también promueve sus productos en redes sociales, muchas veces hacen negocios por correo electrónico y Whatsapp.
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Ester asegura que su primer mueble lo construyó a la edad de 15 años, su padre era carpintero y ella aprendió con el ejemplo.
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El sueño de las hijas de Ester Martínez es culminar sus estudios para poder estudiar carreras que les permita administrar de mejor la mueblería. Foto EDH/ Menly Cortez
