Dos pumas yaguarundí en peligro de extinción fueron entregadas al MARN

La especie de estas felinas de 5 meses se ve atacada pues su hábitat está siendo destruido por la construcción de viviendas, desarrollo de monocultivos, envenenamiento, atropellamiento, caza furtiva, tenencia en cautiverio y tráfico ilegal.

: Estos dos ejemplares femeninos de gato zonto fueron entregados al MARN por personas particulares en el departamento de Ahuachapán. Foto EDH/ Menly Cortez

: Ambas felinas tienen 5 meses y se encuentran saludables. Foto EDH/ Menly Cortez

: Fueron entregadas cuando tenían dos meses y han estado en la veterinaria desde hace tres meses. Foto EDH/ Menly Cortez

: Las gatitas aún están en la transición de tomar leche a comer carne. Foto EDH/ Menly Cortez

: El gato zonto es una especie de Puma llamada yagouarundi de El Salvador se encuentra dentro de los 4 felinos silvestres que el país posee que son Puma, ocelote, tigrillo y gato zonto. Está especie está presente desde el sur de Estados Unidos hasta el norte de Argentina. Foto EDH/ Menly Cortez

: Esta especie llega a medir no más de 90 centímetros. Foto EDH/ Menly Cortez

: Estos felinos son carnívoros, su dieta incluye pequeños vertebrados, como serpientes y lagartos, aves y mamíferos, también peces. Foto EDH/ Menly Cortez

: El puma yagouarundi se considera una especie en extinción pues parte de su hábitat está siendo destruida por actividades humanas como viviendas en zonas urbanas, desarrollo de mono cultivos o agricultura extensiva, antipatía por las personas por el conflicto con el mal manejo de los animales de corral, envenenamiento, atropellamiento en carreteras, caza furtiva o indiscriminada, tráfico ilegal y tenencia en cautiverio. Foto EDH/ Menly Cortez

: Al invadir el hábitat de estas especies y cazar las especies silvestres de las que se alimentan los estamos dejando sin alimento. Foto EDH/ Menly Cortez

: El Puma Yagouaroundi es de ambientes límite entre los bosques tropicales y subtropicales, cerca de bosques primarios entre otros, ya sea naturales o en la forma de campos de cultivo y potreros. En el caso de cultivos son cazadores de roedores por lo que funcionan como controladores biológicos o de “plaga”. Foto EDH/ Menly Cortez

: En El Salvador aún no se cuenta con un estudio poblacional de esta especie pero se conoce que tienen un rango territorial de 8 a 9 km; este año el Ministerio de Medio Ambiente y recursos Naturales, MARN, ha atendido 4 crías, mientras que en el período del 2019 se atendieron 8 especímenes, lo que da la idea que es una especie común en el campo, comparado a Uruguay que lo había decretado extinto hasta 2016, cuando obtuvo por primera vez un avistamiento desde 1920. Foto EDH/ Menly Cortez

: Las personas que sean acusadas de mantener animales en peligro de extinción por tener en su poder alguna especie puede llegar a pagar una pena de 3 a 5 años en prisión; las faltas o infracciones administrativas a la Ley de Conservación de Vida Silvestre son clasificadas en cuatro categorías: leves, menos leves, menos graves y graves y las multas van desde 1 salario mínimo hasta 100 salarios mínimos. Foto EDH/ Menly Cortez