Argentinos que recorren el mundo en un carro de 1960 pasan por El Salvador
Estos viajeros sudamericanos dejaron todo en su país para emprender la aventura de sus vidas: viajar. Durante este camino conocieron El Salvador y se enamoraron de él.
Los argentinos emprendieron esta aventura hace 4 años a bordo de una camioneta Estanciera de 1960. Foto EDH/ Marcela Moreno
Cyntia Riedel, de 40 años, y Andy Carrizo, de 36, son una pareja argentina que hicieron una parada en El Salvador durante su viaje hacia Alaska. Foto EDH/ Marcela Moreno
Los argentinos emprendieron esta aventura hace 4 años a bordo de una camioneta Estanciera de 1960. Foto EDH/ Marcela Moreno
En su recorrido han conocido Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Guatemala, México y, por segunda vez, El Salvador. Foto EDH/ Marcela Moreno
“Habíamos visto poco de El Salvador y la gente nos había encantado”, comenta Cyntia sobre su regreso al país. Foto EDH/ Marcela Moreno
Pero tomar la decisión de dejar su país no fue fácil. Cyntia dejó su trabajo como contadora y Andy como taxista y vendieron todo lo que tenían para realizar su mayor sueño: viajar. Foto EDH/ Marcela Moreno
La pareja relata que en sus primera citas, hace 5 años, siempre terminaban sus pláticas hablando sobre hacer un largo viaje y en la tercera decidieron que ese era el momento perfecto. Foto EDH/ Marcela Moreno
Tomada la decisión adaptaron su camioneta para ser su transporte y nueva casa durante el camino. Foto EDH/ Marcela Moreno
Ellos han hecho una pequeña cocina y lavaplatos en el interior del auto. Foto EDH/ Marcela Moreno
También han creado, con ingenio, una cama para ambos donde se ahorran los hoteles costosos. Foto EDH/ Marcela Moreno
Aunque se han presentado en algún momento fallos técnicos, este auto clásico ha recorrido 3 mil kilómetros desde Argentina hasta Ilopango, municipio de San Salvador. Foto EDH/ Marcela Moreno
Según cuenta esta pareja, su viaje es económico. Buscan que sea su ropa sea versátil, comen en los mercados de las ciudades que visitan y se evitan de salidas a cines o restaurantes. “Vivimos con lo justo y necesario”, dice Andy. Foto EDH/ Marcela Moreno
Asimismo, se costean sus gastos vendiendo los cuadros que pinta Cyntia con frases inspiradoras. Foto EDH/ Marcela Moreno
Al igual que hacen voluntariados dando su talento de pintar a cambio de hospedajes o alimentación. Foto EDH/ Marcela Moreno
Durante el camino Andy documenta las maravillas de los países que visita para darlo a conocer al resto del mundo. Ambos dicen que antes de venir a El Salvador escucharon cosas que los asustaron pero al llegar se dieron cuenta de algo diferente y por eso decidieron regresar y mostrarlo a sus seguidores. Foto EDH/ Marcela Moreno
Sus videos son publicados en su canal de YouTube: “Viajar vale la pena”. Este medio les ha permitido ganarse el cariño de los usuarios que ven los destinos que visitan. Foto EDH/ Marcela Moreno
Los argentinos dicen que han sentido el amor y el cariño de los salvadoreños, han recibido desde comida, cargadores para celular, paraguas, lámparas y otros recuerdos. Foto EDH/ Marcela Moreno
Aunque aún les faltan kilómetros por recorrer, Cyntia y Andy no pierden su impulso de conocer más y disfrutan su estadía en tierra cuscatleca a bordo de su querida Estanciera. Foto EDH/ Marcela Moreno
