Una hermosa amistad ha florecido entre Verónica Guerrero y Ale Costa, dos guapas presentadoras salvadoreñas que comparten set en el programa “De mujer a mujer”. Ambas siempre hacen travesuras juntas y no paran de compartir momentos divertidos, los cuales quedan guardados en las redes sociales.
Sin embargo, durante este fin de semana, un emotivo momento acaparó la atención en la web. Todo ocurrió, ayer (domingo), cuando Costa disfrutaba a lo grande de un desayuno como despedida de la fila de las solteras; pues la celebridad contraerá matrimonio el próximo 5 de noviembre.
Rodeada del más famoso squad de la TV la salvadoreña, participó de divertidas dinámicas y recibió espectaculares regalos de los asistentes, entre estos el de Guerrero, uno que la hizo romper en llanto por su particularidad.
Fue en una historia de Instagram, donde Costa compartió el gesto con su más de 300 mil seguidores. "Una amiga como tú es difícil de encontrar, fácil de querer e imposible de olvidar", escribió Ale, junto a una fotografía de la entrega del detalle.
A la vez, agregó que revelaría el contenido del regalo después de la boda. "Un regalo que sacó las lágrimas... después les enseñaré qué es", puntualizó.
Por su parte, Guerrero adelantó que se trata de un accesorio que la presentadora lucirá el día de su boda; ya que la tradición apunta que como símbolo de buena suerte, las novias deben llevar algo regalado.
"La novia debe llevar algo regalado…", escribió Verónica, en una publicación que ya acumula más de mil 700 "me gusta".
Al desayuno asistieron reconocidos rostros de televisión, entre los que destacan: Carolina Sandoval, Larissa Graniello y Alba Delgado.
Hace tres años, Ale Costa aceptó el compromiso con Alejandro Rodríguez, con quien ha procreado dos hijos. Ahora, la pareja se encuentra próxima a dar este gran paso en su relación personal y como padres.
Sin duda alguna, los Rodríguez están viviendo su amor al máximo y disfrutan mostrarlo al mundo. Costa es una de las figuras públicas salvadoreñas con mayor popularidad en las redes y por tanto, las felicitaciones no se han hecho esperar.
