El cuerpo de la actriz Naya Rivera fue encontrado ayer tras un arduo trabajo en el lago donde desapareció el pasado miércoles cuando salió a navegar con su hijo.
En menos de 24 horas de la localización, se dieron a conocer los resultados de la autopsia de Rivera que arrojaron la causa de la muerte de la protagonista de “Glee”.
El médico forense del condado de Ventura confirmó que el cuerpo fue encontrado en el lago Priu y que la forma de muerte fue un accidente. La autopsia reveló que no había indicios de violencia ni de alguna enfermedad en el cuerpo.
“Los hallazgos de la autopsia son consistentes con un ahogamiento y la condición del cuerpo es consistente con el tiempo que estuvo sumergida. No se identificaron lesiones traumáticas o procesos de enfermedad en la autopsia. No hay indicios de la investigación o examen de que las drogas o el alcohol hayan jugado un papel”, decía en el informe.
En la mañana del lunes, cuando comenzaba el sexto día de búsqueda, las autoridades anunciaron que habían avistado un cuerpo cerca de la superficie que no portaba chaleco salvavidas y que posteriormente identificaron como el de Rivera, a quien llevaban buscando desde el miércoles en un lago al norte de Los Ángeles.
Naya Rivera habría muerto luchando por impedir que su hijo se ahogara
Alquiló un barco de recreo con su hijo de 4 años
Rivera, de origen puertorriqueño y popular por aparecer en la serie de televisión “Glee”, rentó un bote de recreo con su hijo de 4 años a primera hora de la tarde pero cuando ninguno de los dos regresó, un segundo barco localizó al menor solo y dormido sobre la embarcación con un chaleco salvavidas.
A partir de ese momento se produjo la llamada de emergencia tras la que más de 80 profesionales han tratado de rescatar -las primeras horas- y recuperar -después- el cuerpo en una operación para la que se han utilizado buzos, drones y un sonar de barrido dada la escasa visibilidad debajo del agua en el cuerpo de agua.
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Aunque se desconocen las causas por las que Rivera murió ahogada, la Policía cuenta con el testimonio del menor, quien estaba ileso y contó que salió a nadar con su madre, quien no portaba chaleco y nunca regresó.