En el año 2000, cuando Priyanka Chopra ganó la corona de Miss Mundo, su vida cambió de manera radical, no solo porque representaba a la mujer más linda del planeta, sino porque su rostro cambió completamente.
La famosa no había abordado el asunto desde hace años por las crueles marcas que le dejó en su autoestima, pero la reciente autobiografía que ha publicado “Memoir” revela algunos pasajes de ese entonces que la descolocaron emocionalmente.
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A raíz de una mala cirugía plástica se ganó sobrenombre de “Plastic Chopra”, un apodo de muy mal gusto pero que se debió a que su cambio de look fue más que obvio. Resulta que se sometió a la operación porque necesitaba que le removieran un pólipo de la cavidad nasal, realmente no era un cambio estético necesario.
Sin embargo, el médico afeitó accidentalmente el puente de la nariz de ella y le ocasionó. “Me sentí horrorizada, devastada y desesperada”, sostuvo en su libro. Y es que cada vez que se veía al espejo sentía que era una persona extraña. Le costó mucho volver a amarse a sí misma luego de ese incidente y fue más difícil tener una mejor autoestima a pesar del sobrenombre que la prensa de ese entonces manejaba.
Dicha circunstancia hizo que tomara una radical decisión de su vida, a partir de entonces no iba a dar pistas sobre lo que hacía o no hacía. Pero antes aclaró qué la motivó a operarse la nariz y prometió no dar más respuestas. “Solo porque soy una persona pública no significa que todo sobre mi vida tenga que ser de conocimiento público, puedo elegir lo que comparto y cuándo lo comparto”, subrayó en esa oportunidad.
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“Thamizhan” era un largo cortometraje para el que firmó un contrato de dos años y del que la sacaron porque su carrera actoral se vino abajo por ese “cambio de apariencia” muy mal visto. Y en adelante perdió más y más oportunidades.
Pero llegó a un punto en el que decidió dar rienda suelta a esos arreglitos estéticos, sometiéndose a más y más. Claramente recuerda que un director le dijo que para tener éxito en la gran pantalla tenía que operarse los glúteos y senos. Y, de hecho, lo hizo y hasta la fecha se siente bien consigo misma a quien llama una Chopra “ligeramente” distinta.