FOTOS: Cojutepeque, la ciudad de los embutidos que fue capital de El Salvador en cuatro ocasiones

Según historia compartida por la municipalidad, los indígenas de dicha ciudad secundaron "con heroísmo" el primer Grito de Independencia de Centroamérica.

descripción de la imagen
Casa Presidencial, en los años en que fue capital de la República. Foto EDH/ Cortesía de Francisco Berciano

Por Kevin Rivera

2019-11-11 7:28:50

El pasado 10 de noviembre los cojutepecanos celebraron el 173 aniversario de su título como ciudad. Esta fecha es de gran importancia y significado para los habitantes de la localidad ya que refleja años de lucha incansable y servicio a los ideales de libertad de El Salvador.


Plaza Central de Cojutepeque, llamada antiguamente “Plaza San Sebastián” o “Plaza 15 de septiembre”. Foto EDH/ Cortesía de Francisco Berciano

En este artículo, El Diario de Hoy explora parte de la historia que acompaña la bella ciudad de los embutidos, que fue capital de El Salvador en varias ocasiones. Así que… ¡adentro Cojutepeque!

Cojutepeque bajo una gran montaña

Según datos recolectados por la Alcaldía de Cojutepeque, esta población, cabecera departamental del departamento de Cuscatlán, fue fundada por indios yaquis o pipiles en tiempos inmemorables, pues como tal la ciudad ya existía en los duros momentos de la conquista Española. Su nombre autóctono significa literalmente “Cerro de Las Pavas”, y aún conserva la eminencia volcánica en cuyas faldas se fundó el pueblo.

Plaza “Las Alamedas” en 1930. Foto EDH/ Cortesía de Francisco Berciano

También, esos mismos datos afirman que Cojutepeque ha sido la cuna de la caña de azúcar en El Salvador desde mediados del siglo XVI, cuando tres encomenderos sembraron por primer vez la caña de azúcar en sus tierras. Sus nombres eran Sancho de Figueroa, Pedro de Fuelles y Rodrigo Díaz.

De acuerdo a un informe gubernamental de Suchitoto del 15 de enero de 1860 que dice: “Relativamente ‘a Cojutepeque’ es de nombre indígena y quiere decir, Cerro de Pavas, según la opinión de los habitantes de aquella ciudad”, también se sabe que su nombre viene de dos voces o raíces del idioma nahuatr: coju, pava; tepec, cerro, montaña, localidad.

La lucha cojutepecana

De acuerdo a datos proporcionados por la alcaldía del municipio, la villa de Cojutepeque obtuvo el “Título de Ciudad Leal” por Decreto Ejecutivo el 10 de noviembre de 1846 por el Presidente de Estado, Eugenio Aguilar, y refrendado por el Ministro de Relaciones y Gobernación, Francisco Dueñas, en “justa recompensa de la lealtad con que sirvieron al gobierno aquellos vecinos en derrocar la administración de Francisco Malespín”, presidente electo en 1844.

Al General Francisco Malespín se le atribuye la iluminación de San Salvador y el apoyo para la fundación de la Universidad Nacional de El Salvador. Sin embargo, en su mandato hubo varias revueltas de indígenas en todo el país, ya que esta población lo repudiaba por acciones racistas en contra de ellos. Por esa razón, los indígenas de Cojutepeque apoyaron a Eugenio Aguilar en el derrocamiento de Malespín, y en agradecimiento, se les otorga el título de ciudad.

Cuartel Militar de Cojutepeque, siglo XIX. Foto EDH/ Cortesía de Francisco Berciano

Francisco Berciano, un habitante de Cojutepeque que se ha encargado de recolectar datos, objetos y fotografías históricas de su ciudad a lo largo de su vida, nos comenta que “los indígenas de Cojutepeque tuvieron más de 25 años consecutivos en revoluciones en el siglo XIX”.

Según historia compartida por la municipalidad, los indígenas de dicha ciudad secundaron “con heroísmo” el primer Grito de Independencia de Centro América.

Al grito de “mueran los chapetones” asaltaron la población española. En el asalto murieron varios españoles peninsulares. Y el 30 de noviembre de 1811, fuerzas capitalinas al mando de Modesto Chico recuperaron la plaza y persiguieron a los rebeldes. Los cojutepecanos, según los documentos compartidos, secundaron el segundo movimiento autonomista de San Salvador, iniciado el 24 de enero de 1814.

Además, entre 1856 y 1857 enviaron numerosos batallones desde Cojutepeque para combatir a William Walker, filibustero estadounidense que estaba apropiándose de Nicaragua.

Cojutepeque, capital en cuatro ocasiones

Según Berciano y datos de la alcaldía municipal, Cojutepeque fue cuatro veces capital interina de El Salvador. Las razones por las cuales sucedía ese cambio, era por desastres naturales en su mayoría.

Antiguo kiosko en el Parque “Francisco Menendez”, conocido como “Parque Viejo”, en los años 30. Foto EDH/ Cortesía Francisco Berciano

-La primera vez fue el 29 de octubre de 1832, cuando el presidente Mariano Prado traslada la capital por unos días a Cojutepeque por unos conatos revolucionarios que habían en San Salvador.

-En 1834, también el presidente Joaquín de San Martín, al igual que Prado, volvió a trasladarla por otras situaciones de carácter revolucionario.

-Luego, el General Francisco Morazán, por un temblor que afectó San Salvador el 1 de octubre de 1839, lleva también la capital para ese lugar, aunque fue por poco tiempo.

-Posteriormente, de 1854-1858 se trasladó por última vez la capital. Esto fue por un macro sismo que destruyó completamente a San Salvador.

“Hay un decreto del 17 de abril de 1854, donde José María San Martín firma y declara en Soyapango que se traslada la capital de San Salvador a Cojutepeque hasta el 28 de junio de 1858, cuando el general Barrios lleva de nuevo la capital a San Salvador”, narra Berciano.

En los años en que Cojutepeque fue capital, estuvieron de presidentes don José María San Martín, Francisco Dueñas, Patricio Rafael Campos, Lorenzo Zepeda, don Miguel Santín del Castillo y el Capitán General Gerardo Barrios.

Moliendas de Cojutepeque en 1960. Foto EDH/ Cortesía de Francisco Berciano

Cojutepeque ha sido partícipe de innumerables luchas para la independencia de Centroamérica, sin embargo, pocos conocen estos hechos. Esta historia es la que hace que los cojutepecanos celebren tanto su institución como ciudad y les haga sentir orgullosos de donde son.

“Esto es tan solo un poco de la historia que guarda Cojutepeque”, manifiesta Berciano, quien mantiene un pequeño museo de fotografías en su casa.

Esta ciudad tiene en sus entrañas un manantial de historia que narra también la identidad de los salvadoreños. Más allá de los chorizos, butifarras y salchichones, Cojutepeque es muestra de la riqueza cultural que guarda El Salvador.

“Conociendo todo lo que hizo el pueblo cojutepecano por El Salvador, no solo los que somos de acá deberíamos celebrar la institución como ciudad, sino todo el país”, concluye.

Plaza “San José”, en los años 80. Foto EDH/Cortesía de Francisco Berciano