Tres agentes y un motorista de la Policía Nacional Civil (PNC) seguirán siendo procesados judicialmente por golpear a un pandillero detenido, pero lo harán en libertad, según resolvió ayer el Juzgado Segundo de instrucción de Santa Ana.
Neftalí Ulises Martínez, Mario Ernesto Jiménez, Ana Lucía Cárdenas y el motorista Jorge Vitelino Cardona, todos destacados en la Unidad de Emergencias 911 de Santa Ana, son acusados de los delitos de lesiones e incumplimiento de deberes, en perjuicio de Fernando José Sosa Castro y de la Administración Pública.
Los agentes fueron captados a través de una cámara de vídeo, en el momento que daban puntapiés en diferentes partes del cuerpo a un pandillero que habían detenido y que se hallaba esposado y tirado en el suelo boca abajo.
En las imágenes, que se hicieron virales en redes sociales, también se aprecia cómo uno de los policías se para sobre la cabeza del detenido y ejerce presión sobre él con las botas.
El hecho ocurrió el 6 de noviembre, alrededor de las 11 de la mañana cerca de línea férrea de la colonia El Progreso, de Santa Ana, y fue divulgado a través de redes sociales.
Tras la difusión del vídeo, el director de la Policía Nacional Civil (PNC), Mauricio Arriaza Chicas, cuestionó la acción de los agentes y ordenó las detenciones.
“Los agentes involucrados en el abuso y exceso de fuerza policial, ya están capturados y serán procesados por los delitos de lesiones e incumplimiento de deberes”, informó Arriaza a través de Twitter.
Parte de las versiones de los agentes implicados en el delito, manifestaron que minutos antes el hombre, señalado de pandillero, había agredido a una mujer policía, huyó y luego fue capturado.
Según reportes oficiales, la víctima fue identificado como Fernando Sosa Castro, de 20 años, quien fue detenido por el delito de posesión y tenencia de droga; según la Policía, es miembro activo de la estructura terrorista MS, y es conocido con el apodo Chepe Greñas.
El reporte oficial detalló que el imputado presentaba lesiones en su rostro, cabeza y tórax.
Según la oficina de prensa de Juzgados de Santa Ana, en la audiencia inicial de ayer, a uno de los policías se le decretó instrucción formal sin detención por el delito de incumplimiento de deberes, y a los otros tres agentes se les decretó instrucción formal con medidas sustitutivas a la detención.
Audiencia inicial contra marero
Sosa Castro, la víctima de los policías, también fue procesado en libertad ayer en el Juzgado Segundo de Paz de esta ciudad, acusado por el delito de tráfico ilícito de drogas.
Al imputado se le encontró 65 gramos de marihuana, con las cuales se calcula que pudo hacer 130 cigarrillos con un valor en el mercado negro de $74.21, aseguraron fuentes judiciales.
El Juzgado ordenó a Sosa Castro que se presente cada ocho días al Juzgado de Instrucción asignado y que no cambie de domicilio.
Otro caso de abuso policial
A finales de julio pasado, El Diario de Hoy publicó la historia de un joven de 20 años, que fue torturado por agentes de la Sección Táctica Operativa (STO) de la Policía, quienes luego lo dejaron en un cañal y le prendieron fuego. La historia macabra ocurrió en el cantón San Nicolás, de Apopa.
El joven relató que como cada día se dirigía a visitar a su novia y cuando caminaba cerca de la vía férrea, cuatro policías le ordenaron pararse y que se identificara. Pero no le creyeron que iba a visitar a la novia. Al ver que tenía tatuajes (no alusivos a maras) lo comenzaron a golpear y a acusarlo de que era pandillero. Lo llevaron en dirección al cerro El Sartén. Allí uno de ellos lo intentó estrangular; el joven, que en el proceso judicial es identificado como “Enero”, dice que cuando recobró el conocimiento estaba enmedio de las llamas. Milagrosamente sobrevivió.