LA UNIÓN. La Policía Nacional Civil acordó multar a los conductores que dejen las rastras estacionadas a orillas de un carril del tramo de la carretera que se construye desde el desvío San Carlos hacia la frontera El Amatillo, en Pasaquina, debido a los inconvenientes que se generan en el flujo vehicular que afectan a los mismos transportistas, vehículos particulares y transporte colectivo.
Las autoridades de Aduanas, Migración, la Policía y representantes de la empresa constructora que ejecuta la obra se reunieron ayer para buscar las alternativas que les ayuden a mejorar el tráfico vehicular y evitar el desorden que actualmente se está generando. El tema de las infracciones fue una de las alternativas acordadas.
La subinspectora Mercedes Juárez, jefe del puesto policial de Pasaquina, manifestó que la empresa constructora se comprometió a contratar más gestores de tránsito; mientras que Aduanas y Migración, a incrementar el apoyo en los turnos de noche para que se genere agilidad en los trámites para los representantes del transporte de carga pesada.
Según Juárez, el compromiso de la Policía también incluye desplazar a todos los furgones que están en el hombro de la carretera, esperando el turno para hacer el trámite en la ventanilla de Aduanas.
“Los motoristas deberán buscar los parqueos o estacionamientos que hay en el lugar, lo que pretendemos es que el flujo vehicular de entrada y salida esté simultáneamente funcionando”, agregó.
También realizarán patrullajes constantes para verificar que no exista desorden vehicular.
Por su parte, los motoristas de buses interdepartamentales sostuvieron que hay días en que deben esperar hasta cuarenta minutos para que les den el paso, e insistieron en que son pocos los gestores de tránsito que tiene la empresa en todo el tramo del proyecto vial.
Leonidas Villalta, administrador de Aduanas, manifestó que los inconvenientes que se han dado son debidos a que hay un recarpeteo en una carretera, que es punto de entrada y salida del país donde hay controles aduanales.
Villalta aseguró que el sistema de Aduana se mantiene estable y que no afecta al control que se ejerce en las plumas. “N osotros no podemos regular que un motoristas se quedó mal estacionado o se atravesó en la carretera porque no es nuestra competencia”, afirmó.
Hugo Díaz, gerente del proyecto vial, dijo que el caos vehicular se ha dado durante cuatro días y que la alternativa es liberar los hombros de la carretera porque no son para estacionarse como lo hacen algunas rastras, y eso genera que solo quede un carril para circular.
“Pedimos las disculpas del caso. Es un proyecto de carretera que siempre genera inconvenientes, contamos con 12 gestores y los combinamos en dos turnos; vamos a evaluar si se necesitan más y si es necesario que estén las 24 horas”, agregó Díaz.
En tanto, Arnulfo Valdez, motorista de un furgón, comentó que pasó más de ocho horas en la fila esperando el paso. Agregó que en la frontera El Amatillo los trámites son siempre lentos, y la construcción de la carretera ha generado más desorden para el paso en general.
El proyecto de la carretera inició el pasado 4 de junio y finalizará en enero de 2020. La construcción es a lo largo de 5.6 kilómetros, en una inversión de 8.5 millones de dólares con fondos Fomilenio II.