El presidente de la Liga Contra el Cáncer, Salvador Díaz Bazán, consideró que la medida del Gobierno de suspender la circulación del transporte público tendrá consecuencias entre las personas con enfermedades crónicas como el cáncer, pero aún no determinó hasta dónde llegará ese impacto.
“El cáncer mata en el país a 5,000 personas al año. No podemos saber cuánto nos va a afectar. Nuestro servicios están terriblemente alterados”, dijo el presidente de la organización sin fines de lucro.
Eso sí, aseguró que ha habido una reducción drástica en la cantidad de personas que llegan a recibir tratamientos o a realizarse exámenes.
Según dijo, la situación actual les afecta porque, “número uno, la gente no puede venir; y dos, porque somos una ONG y estamos con serias limitantes económicas, porque la gente que nos ayuda ha bajado, y a eso súmele la situación del país propia que la gente no tiene ni para pagar el boleto (de transporte)”, dijo el médico.
Por otra parte, señaló, la Liga Contra el Cáncer está redoblando esfuerzos para prevenir que personas con el coronavirus puedan llegar a infectar a otros pacientes, algo que sería complicado porque los pacientes están inmunodeprimidos y son blanco fácil para un virus de este tipo.
“Esto es un problema y en el país se está agravado, y estamos con deficiencias de toda clase. No podemos darnos el lujo de que un paciente con Covid entre al instituto, porque sería darle fuego a un cañal. Esperamos que las cosas mejoren”, declaró el especialista.
El médico explicó que han bajado la atención de 200 a 30 pacientes diarios, aunque aclaró que la parte de servicio social del instituto busca cómo ayudar a la mayor cantidad de pacientes que pueda para que lleguen a recibir sus tratamientos.
Díaz Bazán explicó que esta realidad no solo se da en el país, sino que puso como ejemplo a Estados Unidos, donde la cantidad de muertes por cáncer en el contexto de la pandemia subirá en unos 40,000, de acuerdo con cifras oficiales.