El presidente Nayib Bukele y los funcionarios de su Gobierno son los principales agresores de los medios de comunicación independientes y de los periodistas que realizan investigaciones a su gestión, dice un informe de la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES).
La entidad presentó el informe Libertad de expresión en El Salvador 2020 que expone que el año pasado hubo 125 casos de agresiones a periodistas, duplicando los casos en relación a los datos del 2018, donde hubo 65 casos, y una diferencia considerable a comparación con el 2019 que hubo 77 casos.
Los principales agresores denunciados fueron funcionarios públicos, la Policía Nacional Civil y el Gabinete de Salud Ampliado, además de otras instituciones públicas, seguidores de partidos políticos casa presidencial, sindicalistas y usuarios de redes sociales principalmente simpatizantes del Gobierno.
Angélica Cárcamo, presidenta de la APES, dijo que hay un retroceso a la libertad de expresión y a la libertad de prensa, donde es el propio Gobierno el que impide el ejercicio periodístico.
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“La mayoría de los registros que hemos tenido se generaron sobre todo durante la pandemia de COVID-19, en los meses de marzo hasta septiembre cuando vimos la mayor parte de vulneraciones. Es muy preocupante el alza de casos sobre todo porque en 2019 los casos se sentaron en la coyuntura electoral de febrero, en el 2020 las vulneraciones se mantuvieron todo el año, que ha llamado la atención de la comunidad internacional, por la afectación a periodistas y medios, que no se veía desde los Acuerdos de Paz”, señaló Cárcamo.
Destacó que a comparación de otros años, cuando los ataques a periodistas eran por la violencia social, ya sea por pandillas, crimen organizado, afectación a gobiernos locales; ahora las agresiones en más del 90 % vienen de entidades del Estado, donde los funcionarios han restringido el derecho a la información y han agredido a periodistas.
“Las afectaciones en redes sociales son una tendencia desde las elecciones del 2019 que vinieron en aumento, la mayoría de los ataques digitales provienen por funcionarios, encabezados por el presidente de la República, Nayib Bukele que también se ha dedicado a bloquear usuarios en sus redes sociales, a periodistas ante todo, luego le siguen sus funcionarios, también de simpatizantes del gobierno y le siguen cuentas anónimas”, dijo Cárcamo.
Uno de los casos que se dio a los medios de comunicación en el interior del país , entre marzo y junio, es el bloqueo a las coberturas sobre lo que sucedía en los cercos sanitarios, donde a los periodistas les obligaron a borrar material gráfico, manifestó Cárcamo.
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Los bloqueos por parte del Ejecutivo se han dado en conferencias de prensa y en redes sociales, informó la APES, centrados en bloqueo de acceso a cuentas de funcionarios, como la Secretaría de Prensa de la Presidencia a medios de comunicación investigativos, lo que vulnera el acceso a la información pública.
Los acosos digitales y declaraciones estigmatizantes por parte del presidente Bukele son una tendencia utilizada para catalogar a un medio de comunicación o periodista como alguien que está haciendo algo malo, cuando se cuestiona a un funcionario, dijo la presidenta de la APES.
“Ese tipo de comentarios solo se da en gobiernos de corte autocrático o dictatorial, por eso es preocupante que nuestros gobernantes se dediquen a hacer este tipo de declaraciones que afectan a la libertad de prensa, la APES lo ha dicho en reiteradas ocasiones”, sostuvo Cárcamo.
La gremial de periodistas también se refirió al retroceso en el acceso a la información pública y la ilegalidad con la que se realizó la elección de los comisionados del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) por el sector de periodistas, donde no se hizo la divulgación respectiva, además de que hubo manipulaciones desde la Secretaría de Comunicaciones de la Presidencia. A esto se suma el suspender prácticas de transparencia al impedir las grabaciones de las audiencias, bajo el argumento de causar “fuga de información”.
Periodistas de todo el mundo rechazan ataques
En septiembre del 2020, más de 500 periodistas, escritores, artistas, documentalistas, y otros profesionales de 49 países del mundo respaldaron una carta que la Fundación Gabo envió al relator especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Edison Lanza, para que investigara los ataques por parte del presidente Bukele a medios independientes, por sus artículos investigativos.
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“No solo El Faro fue blanco de los ataques del presidente Bukele el 24 de septiembre. Tres cuartas partes de su alocución de dos horas -transmitida a todo el país- estuvieron dedicadas a denostar y descalificar el trabajo de otros medios de comunicación, como Factum, Focos, Gato Encerrado, El Diario de Hoy, La Prensa Gráfica, Colatino y El Mundo”, decía la carta.