La moda de Milán viaja al pasado

Prada y Alberta Ferretti abrieron la pasarela milanesa. Sus colecciones cuentan con detalles de los años 20 y 70.

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Por Agencias

2019-09-19 3:59:42

Miuccia Prada inauguró ayer el calendario de las grandes firmas en la Semana de la Moda de Milán, y lo hizo con una colección llena de simplicidad y elegancia que, como bien apunta Grazia, hace recordar los dorados años 20, las faldas de los 30 y los 40, todo ello reforzado con accesorios y calzado.

La diseñadora italiana apostó por una colección para la próxima temporada primavera/verano 2020 basada en tonos sobrios como el azul marino, el verde esmeralda, el blanco crudo o el beige, aunque también introdujo fuertes toques de color en prendas amarillo y naranja flúor.

Su colección, sencilla, pero con mucho estilo, ha aprovechado los tejidos para confeccionar prendas en las que ha introducido pequeños cambios, que crean un nuevo estilo.

Así una chaqueta de corte recto, en tonos azul marino y con dos botones blancos colocados en vertical se viste sobre pantalones anchos en tonos marrones, pero esa misma chaqueta incorpora una segunda fila de botones blancos y sirve para combinarse con un vestido negro, largo y ceñido.

También hubo prendas y tejidos versátiles que sirven para muchas personalidades, como el caso de un estampado asimétrico, en tonos negros, naranjas y beige, que Prada utiliza para una camisa de cuello “halter” y también para una falta de estilo deportivo.

El estampado de hojas de helecho decora faldas lápiz beige; abrigos masculinos, de corte recto, con hombreras y en tono naranja; vestidos con solo una manga, con tejidos sedosos y rosados; y también blusas de tirantes de lazos negros y escote de corte recto.

Otra de las casas italianas que presentó su armario en Milán fue Alberta Ferretti, que realizó un viaje a los años 70 en el que apostó por tonos tierra, marrones, mostazas, naranjas y rosas, para mostrar un conjunto de prendas de estilo deportivo y aventurero tipo safari.

Los vestidos largos, de tirantes finos y con escote en pico, con estampados geométricos y transparencias, se alternaron con pantalones de corte por encima de la rodilla, rectos y vaporosos; camisas de rayas sobre petos anchos; y pantalones de talle alto, ajustados a la cintura con lazadas o cinturones, tipo “paper bag”.

Como complementos, la casa italiana optó por las bandoleras cruzadas, los cinturones de trenzas y hebillas circulares, y las gafas de sol con montura Carey.