Una generación de líderes que tengan la capacidad de cambiar paradigmas, identificar oportunidades y maximizar sus recursos para lograr un mayor impacto en sus organizaciones son las metas del primer Diplomado de liderazgo exponencial “Exponential Leaders Social Impact Program”, diseñado por la Singularity University, una red académica con sede en Silicon Valley, California (EE.UU.)- y que desarrolla la Fundación Rafael Meza Ayau (FRMA) en San Salvador durante esta semana.
De acuerdo con el presidente de la Fundación, Roberto Murray Meza, el seminario ejecutivo, que por primera vez tiene lugar fuera de Silicon Valley, se relaciona con el eje de formación social de la FRMA, porque en la actual época cambiante e impredecible, “la innovación y disrupción se ha convertido casi en la única estrategia de crecimiento”.
Para el empresario, el exponencial es un tipo de liderazgo que, precisamente, se adecua a la realidad actual.
“Es un tipo de liderazgo que no solo se centra en crear estrategias para lograr el avance de las organizaciones y empresas en las que trabajamos, sino que también se enfoca en contribuir en la construcción de un futuro más inclusivo, equitativo, positivo y abundante”, señaló el empresario durante sus palabras inaugurales.
En ese sentido, como los cambios, constantes y cada vez más rápidos, son encabezados por las innovaciones tecnológicas; quienes están a la cabeza de las organizaciones necesitan priorizar un sentido de anticipación, de visión tecnológica y futurista y por supuesto un carácter humano.
Entonces ¿qué caracteriza a un líder exponencial? Según Murray Meza, “tener una convicción de que es posible desarrollar esfuerzos colaborativos, identificar oportunidades y aplicar tecnologías ya existentes par la solución de grandes problemas; y segundo, tener la voluntad de hacerlo”.
El director de Impacto de Singularity University -y uno de los ponentes del diplomado-, Brett Schilke, detalló que la metodología de liderazgo exponencial considera dos componentes principales: cómo dirigir el negocio y el futuro de la organización en los entornos cambiantes; y cómo evolucionan las personas y sus roles.
“El mundo en que vivimos ahora esta cambiando muy rápido. Entonces cuando hablamos de liderazgo exponencial hablamos de cuál es la mentalidad que necesitamos para el futuro y para hacerlo de manera exitosa”, detalló Schilke.
Uno de los primeros pasos, insistió, es cambiar la manera en cómo se ven los entornos.
En lugar de ver “problemas” que propicien “debates”, es vital concebir “visiones” que faciliten “crear” soluciones.
Para la FRMA, los líderes en El Salvador deben aprender sobre las tendencias tecnológicas que están transformando el rumbo de las industrias y del mundo; adoptar una mentalidad de aprendizaje continuo y desarrollar una agilidad para adaptarse al cambio.
Y es que, a medida que las tecnologías exponenciales continúan modificando viejos paradigmas para dar paso a nuevas olas de innovación, “el sector de impacto social tiene una oportunidad única de aprovechar estas innovaciones para aumentar la prosperidad y la igualdad”, señaló la Fundación.
El diplomado durará hasta el 6 de diciembre y tiene 85 participantes. Murray Meza señaló que los líderes inscritos son representantes de diversas organizaciones y sectores, del sector público, privado y ONG.
El nivel de calidad de contenido del seminario es tal que para ejemplificar el empresario detalló que si el diplomado fuese en Silicon Valley costaría alrededor de $15,000.
Al ser en El Salvador, en espacios de Grupo Agrisal, y contar con el patrocinio de Banco Agrícola y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la inversión para los participantes es significativamente menor y a su vez el impacto, exponencialmente mayor.
Según resulte la demanda de este diplomado, la FRMA considerará la posibilidad de una segunda edición.
Por el momento, el representante de la Fundación adelantó que el año entrante la FRMA buscará aliarse con otra universidad internacional para desarrollar un seminario ejecutivo sobre administración pública.