Ocho caballeros quedan vivos de los 12 que empezaron el torneo Clausura 2019. Entre ellos hay dos que son los más ganadores de batallas en el fútbol salvadoreño. FAS y Águila se ponen esta noche en la línea de fuego para dos combates “a muerte”, ya que solo uno podrá clasificar a semifinales. Los migueleños llegan con ventaja deportiva a esta etapa de cuartos de final, por lo tanto, con dos empates se clasifican.
El equipo santaneco clasificó a los cuartos ganando siete juegos, empató ocho y perdió otros siete, con lo que logró 29 puntos. El rival es un Águila que con varias jornadas de anticipación amarró su pase y luchó hasta el final por arrebatarle el liderato a Alianza, pero no le alcanzó. Sin embargo, junto a los paquidermos, son los equipos que menos partidos perdieron (3).
El clásico nacional tiene esta inmejorable oportunidad de cambiar la imagen, puesto que desde hace varios torneos han sido compromisos con pocas emociones, que llegan al punto de ponerlo en tela de juicio si es o no el clásico.
De hecho, las últimas presentaciones que han tenido entre sí han terminado con partidos trabados y de pocos goles. En la fase regular de este Clausura firmaron dos empates (0-0 y 1-1), por lo que hoy se espera algo parecido, porque un error les puede costar la eliminatoria.
Diego Coca, volante de los migueleños, dijo ayer en el programa radiofónico Los Provocadores que este juego se enfrenta “con intensidad” y que no “nos aferramos a la ventaja deportiva. Si nos acomodamos nos puede pasar factura”.
El uruguayo Waldemar Acosta comparte la idea de su compañero, de no confiarse de la ventaja deportiva, puesto “que una jugada te puede dejar afuera”. Hoy es otra historia, empieza un nuevo torneo, pero emplumados y tigrillos vienen de cerrar la fase regular con empates ante Metapán y Jocoro, respectivamente.
Un dato tienen en común los protagonistas del clásico nacional y es que en el torneo Apertura pasado fueron eliminados en semifinales, instancia donde solo uno podrá estar en el Clausura. Más doloroso fue para los asociados, ya que se quedaron en el camino tras ser eliminados por un gol en el minuto 93 en contra de los albos. Hoy quieren quitarse esa espina y volver a jugar una final.
En este mismo lado de la llave de cuartos de final, Chalate y Limeño juegan la ida hoy a las 6:30 p.m., en el estadio Gregorio Martínez. Los norteños tienen tres partidos seguidos sin ganar y el último registro es una goleada de 5-2.
Limeño, entre tanto, encontró regularidad temprano en el torneo y la ha mantenido hasta la fecha. Hoy deben demostrarlo y tratar de dar un golpe de autoridad en “el Sombrero” para cerrar tranquilos la serie en Santa Rosa de Lima.
Siempre metidos en esta ronda de ida y vuelta, mañana se juegan los otros dos partidos. Como pocas veces ha sucedido, menos en este momento del certamen, Pasaquina y Santa Tecla, que son locales ante Alianza y Metapán, programaron una doble jornada en el Cuscatlán.
A las 6:00 p.m. los tecleños abren de locales porque los cementeros quedaron arriba en la tabla, inusual para el vigente campeón porque en los últimos torneos había contado con esa ventaja.
La doble la cierran los burros, a las 8:30 p.m., que decidieron ser los anfitriones de la fiesta en la casa de los capitalinos, equipo al cual le ganaron la serie de fase regular, con cartones de 0-0 y 1-2.