SAN MIGUEL. Las autoridades del El Instituto Salvadoreño par El Desarrollo Integral de la Niñez y la Adolescencia (ISNA) inauguraron la nueva instalación administrativa del Resguardo municipal de San Miguel, que albergará adolescentes en conflicto con la ley penal juvenil. Las obras, realizadas con fondos de la Cooperación Italiana, incluyen una clínica, área de observación, espacio de entrevista y área de atención técnica.
“Este proyecto significa mejores condiciones tanto para el personal del ISNA que va a estar pendiente y atento a los jóvenes que están en el resguardo de la ciudad de San Miguel, con el apoyo del CAM, así como contar con diferentes espacios como un área de atención para que los jueces puedan desarrollar actividades judiciales, incluso audiencia judicial si así lo consideran oportuno”, explicó el subdirector de programa de inserción social del ISNA, Vladimir Montoya.
El proyecto que financió la cooperación italiana es parte del plan “Menores y Justicia”, que va orientado a fortalecer las condiciones y los programas de atención de las adolescentes en conflictos con la ley.
“No es solo un espacio protegido y adecuado para los adolescentes, sino un elemento fundamental para desarrollar un sistema de atención integral a los adolescentes, y en este sentido la Cooperación Italiana se para al lado de las instituciones de El Salvador para seguir impulsando hacia un sistema mas orientado a poner una atención integral a los niños, niñas y adolescentes”, dijo Valeria Infante, representante de la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo.
Esta es la segunda intervención que el ISNA realiza en el resguardo de San Miguel, ya que en 2017 concluyeron las obras de mejoramiento en el área de bartolinas que recibe a los jóvenes provenientes de la zona oriental.
El resguardo tiene capacidad para albergar a 12 adolescentes, ademas de un área especial para señoritas; sin embargo, el número de adolescentes privados de libertad varía, según las actividades que realice la Policía.
Los jueces de menores de Morazán y Usulután agradecieron la construcción de la obra, ya que hoy podrán realizar alunas audiencias cuando fuera necesario.
“Me parece muy importante que después de 24 años de que se creó este resguardo producto de la entrada en vigencia de la Ley Penal Juvenil, se esté mejorado la infraestructura y de alguna manera se tenga más oportunidad de dar una atención digna a los adolescentes en conflicto con la ley penal juvenil”, sostuvo el juez de menores de San Francisco Gotera, Morazán, José Efraín Gutiérrez.
El Juzgado de Menores de ese municipio atiende por diversos delitos a un promedio de 10 a 15 jóvenes al mes, por delitos de asociaciones terroristas, homicidio y violación.
Gutiérrez destacó que no todos los jóvenes que son detenidos por la policía son enviados al centro de resguardo, ya que esa decisión depende de la gravedad del delito.
Fernando Pineda Pastor, juez propietario del Juzgado de Menores de Usulután, consideró que aún faltan por hacer en la atención de los jóvenes.
“En un mes se ven un promedio de 15 adolescentes principalmente por droga, es uno de los delitos más fuertes y que principalmente lo que requiere el adolescente es la atención… se requiere que existan centros donde los jóvenes puedan desintoxicarse de alcohol o droga porque eso sí nos vendría a contribuir”, dijo el juzgador.