Municipios se preparan para más entierros con protocolo COVID-19

Ante el posible repunte de muertes por coronavirus, los municipios se han dado a la tarea de abrir nuevas fosas en los cementerios; pero el problema es que los camposantos ya colapsaron y no tienen espacios.

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Las autoridades municipales sostienen que de ser necesario habilitarían más espacios y podrían recibir fallecidos de otros municipios. Foto / AFP

Por Roberto Alas

2020-05-28 8:50:59

Las alcaldías del país se están preparando para un posible repunte de muertes por coronavirus, neumonías y otras enfermedades respiratorias, las cuales se entierran con protocolo COVID-19.

En San Salvador la comuna anunció, el miércoles 27 de mayo, que estaba cavando 100 fosas más; el nuevo cementerio de Soyapango tiene capacidad para 2,000 entierros por coronavirus; sin embargo, en otros municipios como San Vicente e Ilopango los camposantos ya no tienen espacios.

Hasta el momento, en el cementerio capitalino La Bermeja se han enterrado 70 personas con protocolo COVID-19; de esa cifra, muchos han muerto por coronavirus y otros por neumonía y otras enfermedades respiratorias, dijo el alcalde Ernesto Muyshondt.

En La Bermeja, previendo los fallecimientos por la enfermedad, la comuna preparó inicialmente 118 fosas; ahora la capacidad será de 208 espacios.

En el cementerio Jardín, de Soyapango, “hemos enterrado por COVID-19 a ocho personas, también a 10 que murieron por neumonía y que están esperando el resultado por COVID-19”, aseguró el alcalde Juan Pablo Álvarez.

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En ese mismo municipio, agrego, en el camposanto privado Las Colinas fueron sepultadas 12 personas que murieron por COVID-19.

Ante el posible repunte de fallecimientos por el virus, “hemos dispuesto 2,000 espacios en el cementerio Jardín”, insistió.

Pese a tener suficiente espacio para entierros con protocolo COVID-19, Álvarez expresó que no permitirán que fallecidos de otros municipios se les quiera sepultar en Soyapango.

Los entierros con protocolo COVID-19 también ha hecho que la alcaldía de Soyapango incurra en gastos. Según el edil, por cada persona que es sepultada por coronavirus u otra enfermedad respiratoria, están invirtiendo $250.
Agregó que todos los materiales que se compran son desechables y, para ello, el personal de cementerios ha sido capacitado para realizar ese tipo de entierros.

La capacidad del cementerio es de 7,000 cuerpos y, si la emergencia lo exige, 2,000 estarán disponibles para COVID-19.

San Salvador y Soyapango son los que van a la cabeza de las infecciones por el coronavirus, el primero registra 343 casos y el segundo 194. Las cifras corresponden hasta el jueves 28 de mayo a las 5:00 p. m., según lo refleja el sitio web del gobierno.

Cementerios sin capacidad

En los municipios de Ilopango y San Vicente ya fueron enterradas varias personas por COVID-19; sin embargo, ambos camposantos ya no tienen espacios para enterramientos de cualquier tipo.

En Ilopango, el alcalde Adán Perdomo, dijo que en el municipio ya fueron enterradas tres personas que murieron por COVID-19; pero uno de ellos hacía siete años que no residía ahí. Al cementerio municipal lo llevaron por el simple hecho que en su DUI contemplaba Ilopango como lugar de residencia, aseguró.

“Hablamos con los familiares y nos dijeron que desde hace siete años que vivía en San Vicente; pero aquí lo trajeron y así fue enterrado”, expresó el edil.

Ese camposanto ya no tienen espacio para un entierro más y los que se van haciendo se hacen uno encima del otro”, dijo Perdomo.

“Hemos dispuesto espacio para ocho o 10 personas que mueran por COVID-19; pero ya no damos abasto para enterrar personas en el municipio”, aseguró.

En el cementerio municipal de San Vicente ya fue enterrada una persona que falleció por coronavirus y hay una más que fue sepultada con el protocolo; pero ya no tienen espacio para más, aseguró el alcalde Medardo Hernández.

Este cementerio ya está saturado, pero la alcaldía ha comprado un nuevo espacio que aún no contempla los permisos del Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) para su funcionamiento.

“A las horas de las horas, si esto se nos desborda, vamos a tener que darle uso a ese terreno sin permiso porque no podemos quedarnos así”, expresó el edil.

De acuerdo con Hernández, el nuevo cementerio tiene una capacidad de entre 12,000 a 13,000 enterramientos.
Los permisos para este nuevo camposanto tendrán que esperar, según el alcalde desde casi un año los están gestionando pero el MARN aún no los ha aprobado.

El virus en las comunidades de Soyapango

De los 194 casos que se han reportado en el municipio, más de diez comunidades y colonias tienen habitantes que han resultado positivos al virus, aseguró Juan Pablo Álvarez.

Entre ellas se encuentran la Residencial San Antonio, La Campanera, las cinco etapas de Las Margaritas, Villa de Jesús, San Isidro, Sierra Morena, Ciudad Credisa, Brisas Poniente, Brisas del Sur, Santos 1, entre otras.

Cuando el representante de Salud del municipio les informa la dirección exacta del paciente positivo al coronavirus, personal de la alcaldía acude a realizar tareas de desinfección y, de forma muy reservada, entran a la vivienda del infectado para ejecutar la misma acción.

“Cuando eso sucede, le pedimos a la gente que ni si quiera salga a comprar por el riesgo existente”, expresó el alcalde.

De acuerdo con el edil, la mayor parte de los casos que se han registrado en Soyapango ha sido personal sanitario.
“Ellos no tienen la culpa porque por estar trabajando donde estaba el virus se contaminaron y se volvieron un foco de infección en el municipio”, lamentó Álvarez.

El edil expuso que están realizando trabajo de concienciación en el municipio para evitar discriminación contra las personas y familias que han tenido un caso positivo de COVID-19.

Hubo un caso, contó, en el que un empleado municipal estuvo a punto de ser agredido y sacado de la colonia, después que los vecinos se enteraron que la madre había muerto por una enfermedad respiratoria.