Héctor de Jesús Castaneda es un chalchuapaneco, de 49 años, y con varios de trabajar con el Ministerio de Salud (Minsal) como motorista, donde registra, según su expediente laboral una buena trayectoria… y un buen sueldo a partir de enero de este año.
Sin embargo, Castaneda no trabaja como cualquier motorista del Ministerio de Salud. No.
De acuerdo con documentos oficiales, firmados por la directora de Recursos Humanos de esa cartera de Estado, Castaneda tiene la plaza de motorista II y está asignado al viceministro del ramo, el doctor Carlos Gabriel Alvarenga Cardoza.
De acuerdo con los documentos laborales a los que se tuvo acceso, es una persona muy colaboradora; los mismos también revelan que casi cada año ha recibido mejoras salariales a tal punto que este año alcanzó un salario superior a los $1,000 dólares.
Pastor de una iglesia
Héctor también es conocido como un hombre muy religioso en Chalchuapa, donde está domiciliado.
Aparentemente es parte de la dirigencia de una iglesia evangélica que funciona en la colonia donde vive y donde ha causado asombro que la Fiscalía lo acuse de participar en el ataque armado a militantes del FMLN el domingo 31 de enero, cuando regresaban a un local de ese partido que está a pocas cuadras de las instalaciones del Minsal, en el centro de San Salvador.
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Este imputado, según documentos judiciales, disparó con una arma de fuego hacia el arriate de la 11a. avenida Norte, luego de eso, Alvarado Peña supuestamente comenzó a disparar contra quienes viajaban en la parte de atrás de un camión.
A sus compañeros, Castaneda dijo que Alvarado Peña iba herido porque habían tenido un problema en la Alameda Juan Pablo II.
Sin embargo, a investigadores policiales les dijo que en el sector de la Terminal de Oriente, un camión Kía blanco se les había atravesado y que Alvarado Peña se bajó para indagar qué ocurría.
Segundos después, cuando regresó al auto, ya iba lesionado.
Castaneda no aportó más detalles sobre ese supuesto incidente, y cuando los policías lo llevaron a que les mostrara el lugar donde habían lesionado al guardaespalda del ministro de Salud, no pudo mostrarlo.
Según los investigadores, Castaneda se mostraba muy nervioso y con descoordinación para hablar.
El arma con la que supuestamente Castaneda realizó los disparos al piso el día de los hechos, no ha sido encontrada. Se supone que es una pistola calibre 9 mm, según testigos entrevistados por la Fiscalía General de la República.