El trono de la Copa América espera a su nuevo monarca

Brasil y Perú disputarán hoy la final de la Copa América en el estadio Maracaná, en busca de ocupar el lugar de privilegio que durante dos ediciones ostentó Chile. Los peruanos van por su tercera Copa; los brasileños, el noveno

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Lautaro Martínez (D) de Argentina está marcada por Dani Alves y Marquinhos de Brasil durante su semifinal de la Copa América en el Estadio Mineirao en Belo Horizonte, Brasil, el 2 de julio de 2019. AFP / Nelson Almeida

Por Agencia EFE / Wilfredo Hernández

2019-07-07 4:00:06

La consagración en la Copa América, esquiva para Brasil hace 12 años y tan distante para Perú pues ni el más veterano de sus jugadores actuales había nacido en 1975, tiene una cita con ambos países hoy en un estadio especializado en gestas, coronaciones y desengaños, el Maracaná de Río de Janeiro.

Si se revisara el más reciente antecedente común, habría que concluir que los dioses de fútbol están locos o, como mínimo, tienen sus caprichos.

Esto porque hace 15 días, el 22 de junio, Brasil vapuleó a Perú por 0-5 en el cierre del Grupo A y la permanencia de la Blanquirroja solo fue posible por una combinación de resultados ajenos que la dejaron instalada en los cuartos de final con angustia y por la vía alterna que premia a los dos terceros con mejores notas.

Con tales antecedentes resultaba improbable imaginar un nuevo encuentro entre ambas selecciones, ya con el objetivo de dirimir la conquista del título, que para los peruanos sería el tercero y para los brasileños el noveno.

La Cifra

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Los policías que vigilarán la final de hoy. El ostentoso operativo incluye el uso de cámaras de reconocimiento facial instaladas en los accesos al estadio y en las calles vecinas que permiten identificar personas buscadas por la Justicia.

Pero la percepción de que hay un abismo futbolístico entre la Canarinha, invicta e imbatible hasta hoy, y la Bicolor, guerrera e impredecible durante toda la campaña, quedó desmontada en sus siguientes encuentros.

La solidez defensiva volvió a verse en el partido de cuartos de final contra Uruguay. Incluso el VAR hizo su aporte a la feliz noche de los peruanos al anular tres festejos a los celestes. Y en los penaltis comenzó a crecer la figura del portero Pedro Gallese.

El poder ofensivo de los pupilos de Ricardo Gareca fue exhibido en el llamado Clásico del Pacífico, que ganaron el miércoles por 0-3 a Chile, el campeón de las últimas dos ediciones del torneo.

Estas demostraciones sirvieron para dar un sonoro golpe en la mesa a Paolo Guerrero, que con 13 goles es el máximo anotador en activo en la historia de la competición y quien hoy jugará el centésimo partido con su selección.

Guerrero, de 35 años, exigió respeto y criticó a quienes públicamente habían restado méritos a su selección.

“Una vez que se llega a una final, lo único que queda es ganarla”, avisó el entrenador argentino Ricardo Gareca el miércoles pasado en medio de la euforia de la clasificación a la final.

El arquero de Bolivia Carlos Lampe (d) impide un gol durante el partido Bolivia-Perú del Grupo A de la Copa América de Fútbol 2019, en el Estadio Maracanã de Río de Janeiro, Brasil, el 18 de junio de 2019. EFE/Julio César Guimarães

Bien abrigada

La ambición peruana, que hoy estará reforzada con la presencia en las tribunas de unos 5.000 hinchas, y la graduación como seleccionador importante de Gareca tendrán que superar el rocoso muro que comienza a tomar forma en la renovada selección Canarinha con Tite en el banquillo.

Marca brasileña

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La "Canarinha" buscará un récord histórico de partidos consecutivos sin sufrir ningún gol. Esta hazaña sólo fue lograda por Uruguay en 1917 y en 1987, así como por Colombia en 2001. Una hipotética victoria sin goles en contra también elevará a ocho el número de partidos consecutivos en que Brasil seguirá con su portería invicta, algo que la selección no había conseguido en los últimos 30 años.

Coleccionista de títulos internacionales entre 2008 y 2013 con los clubes brasileños Internacional y Corinthians, la asignatura pendiente de Tite es llevar a la selección verdeamarelha a la conquista de títulos.

El examen en el Mundial de Rusia lo perdió Tite y la Copa América aparece como su primer desafío para renovar la apuesta por una renovación, incluso sin la sombra, muy mediática y hasta polémica de Neymar.

Filipe Luís, ya recuperado de unos fuertes dolores en la parte posterior del muslo derecho, está a disposición de Tite pero en su contra pesa el buen desempeño de su reemplazo, Alex Sandro, desde el segundo tiempo del partido de cuartos de final contra Paraguay.

A pesar de los dolores de Edison Flores que causaron alarma en el partido contra Chile, la fuerza máxima acompaña a Gareca, el hombre que con un agónico gol clasificó a Argentina al Mundial de México 1986 y de paso, con el 2-2 final en el estadio Monumental, inauguró el largo periodo oscuro de Perú, que solo acabó con su llegada al banco.

‘Oreja’ Flores fue sometido el viernes a una resonancia magnética en el tobillo derecho y cumplió un entrenamiento diferenciado; sin embargo, ayer el mismo jugador confirmó que ya está recuperado.

“Me siento bien, recuperado y con ganas de poder estar”, confirmó Flores, que en la semifinal contra Chile (0-3) se llevó un golpe en el tobillo derecho por el que tuvo que pasar pruebas médicas ayer.

También pasó por pruebas de resistencia André Carrillo y su desempeño resultó tranquilizador, pues trabajó con normalidad con el resto de sus compañeros, lo que lo deja a disposición de ‘el Tigre’.

La selección brasileña es la gran favorita para la final de la Copa América que se disputará hoy, pero el escenario, un Maracaná donde ha sufrido derrotas dolorosas, la última la del 1-7 contra Alemania, y el momento de su rival, alimentan la esperanza de la Blanquirroja, que sueña pensando en el “Perunazo”.