“A los salvadoreños que vengan al país los tienen que dejar entrar con prueba de covid o sin ella”, advirtió tajantemente y con todo conocimiento de causa el abogado constitucionalista Francisco Bertrand Galindo.
La razón: el artículo 5 de la Constitución garantiza el derecho de permanencia en el territorio de todo ciudadano.
“Los tiene que recibir, porque no hay Estado de Excepción. Por tanto, no se les puede pedir la prueba obligatoriamente para que entren al país, para que salgan o que suban al avión”, subrayó.
En todo caso, aclaró, tomar una decisión de esas no le compete a la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), la cual administra los puertos y aeropuertos salvadoreños.
CEPA ha enviado un memorándum sobre las disposiciones que regirán a partir del 19 de septiembre, cuando el Aeropuerto Internacional de Comalapa comenzará a recibir vuelos comerciales.
Sin embargo, el abogado constitucionalista Enrique Anaya explicó que es el Ministerio de Salud el responsable de certificar el ingreso de los pasajeros y no las líneas aéreas, CEPA o el funcionario de Migración. Por eso califica la medida de “improvisada” y “ambigua”, pues, a criterio de Anaya, deben implementarse otras opciones para que tanto a los salvadoreños como a los extranjeros se les facilite el ingreso con las medidas de seguridad pertinentes.
“Improvisada” también porque se anuncia a siete días de que se reactive el funcionamiento del Aeropuerto Internacional de Comalapa, tras un cierre de más de cinco meses por la pandemia, explicó.
“Lamentablemente vuelve a ser improvisado porque vemos que falta una semana para que el Aeropuerto abra. Es ambiguo y es oscuro y eso va a generar problemas porque se le está enviando a la línea aérea, le están dando una responsabilidad a la línea aérea que tenga que revisar si la persona va a presentar el llamado certificado de PCR negativo”, subrayó Anaya.
Para el abogado, lo que tiene que hacer el Ejecutivo, a través del Ministerio de Salud, es dar soluciones y no sencillamente poner el requisito, sino decir cómo va a funcionar, decir con claridad qué tipo de documentos quieren exigir y, sobre todo, poner soluciones para los salvadoreños que ingresan.
Pasajeros que entren al país deben presentar prueba de COVID-19
Demanda ante la Sala
Por su parte, el diputado de ARENA, René Portillo Cuadra, quien también es abogado en materia constitucional, advirtió ayer que con esa medida el Gobierno está violentando la Constitución.
Explicó que imponerle la exigencia a un extranjero también trastoca el derecho internacional de que los salvadoreños reciban el mismo trato cuando quieran ingresar a otros países.
Por lo anterior, Portillo Cuadra anticipó que la próxima semana interpondrá un recurso de inconstitucionalidad en contra de dicha medida, la cual calificó como “otro desatino del Gobierno” de Nayib Bukele.
En Costa Rica, por ejemplo, según han informado las autoridades migratorias de ese país, a los nacionales y residentes costarricenses no se les exigirá la prueba de COVID, pero “sí se les dará una orden sanitaria para su aislamiento domiciliar durante 14 días”.
Este tipo de mecanismos son los que deberían desarrollarse en El Salvador, coincidieron Anaya y Bertrand Galindo.
“Es preocupante que al no haber reglas claras todo esto viene a discreción de un empleado de aerolínea o no sabemos en El Salvador quién estará revisando eso. ¿Habrá empleados del Ministerio de Salud o es gente de Migración a la que pondrán a revisar el documento?”, se preguntó Anaya.
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Añadió que el ministerio de Salud debería habilitar áreas sanitarias en el Aeropuerto con personal debidamente capacitado para que hagan pruebas rápidas para determinar si se puede autorizar el ingreso de los pasajeros y nacionales a El Salvador, pero no dejar a los salvadoreños recién llegados sin soluciones ni enviarlos a centros de contención como hizo el Gobierno al principio de las cuarentenas.
Expertos en materia sanitaria advirtieron que los centros de contención se volvieron los centros de contagio más fuertes en el país.
Anaya recordó que en otros países a los recién llegados los envían a cumplir cuarentena a sus casas. “En Costa Rica jamás hubo centros de contención. Les hacen la prueba rápida, esa sería una opción para los salvadoreños”, afirmó Anaya.
Lo que el Gobierno no puede hacer es impedir el ingreso de los salvadoreños, pero la solución para quien se vea rechazado es clara: interponer un hábeas corpus o un amparo ante la Sala de lo Constitucional, enfatizó el abogado.
Por su parte, Bertrand Galindo expresó que si la medida se aplica tanto a nacionales como a extranjeros no sería “prudente”, porque sería “al final como detener la apertura”. En seguida, reflexionó que esas pruebas (PCR) no son rápidas, tienen un costo y se deben hacer 72 horas antes, sin tomar en cuenta que las aerolíneas también han tomado protocolos de sanidad.
Además el abogado calificó de “contradictorio” que no les piden pruebas de COVID a los deportados que vienen de Estados Unidos, pero a los salvadoreños que no tienen problemas legales sí.
Mientras tanto, el Procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, Apolonio Tobar, también enfatizó en que el Gobierno no puede limitar la circulación en el territorio nacional, tal como lo estableció la sentencia de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema.
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Medidas para el ingreso de viajeros en otros países
Aeropuerto de Tocumen – Panamá
Estos son ejemplos de protocolos para el ingreso de viajeros que no violan derechos Establecidos en leyes y convenios internacionales.
Los vuelos internacionales se reactivarán hasta el 12 de octubre, sin embargo, desde el 15 de agosto hay vuelos controlados a 12 destinos entre pasajeros en tránsito y residentes. Los requisitos para ingresar a Panamá son: presentar el certificado de prueba de Hisopado/PCR o antígenos negativos con un máximo de 96 horas (4 días) previo a abordar el vuelo. Firmar un documento proporcionado por la aerolínea, en el que el pasajero se compromete a cumplir con las medidas sanitarias y facilitar el número de teléfono fijo de la residencia donde realizará la cuarentena.
Aeropuerto Internacional La Aurora – Guatemala
El 3 de septiembre el director general de la Dirección General de Aeronáutica Civil de Guatemala, Francis Arturo Argueta, informó por medio de un memorándum que el aeropuerto abrirá sus puertas a vuelos comerciales de pasajeros a partir del 18 de septiembre. Los requisitos para ingresar a Guatemala son: presentar prueba PCR negativo con 72 horas de validez. Si el pasajero no tiene la prueba, debe cumplir una cuarentena de 14 días bajo la supervisión del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social. También instalarán instalación de un laboratorio-centro de salud en el aeropuerto.
Aeropuerto Augusto C. Sandino – Nicaragua
En una publicación oficial del gobierno sandinista se informa que, por disposición del Ministerio de Salud a partir del 14 de julio, los viajeros deberán presentar una prueba con resultado negativo de PCR realizada en un periodo no mayor de 72 horas antes del ingreso al país. Los extranjeros que presenten fiebre o síntomas respiratorios no podrán entrar, sin embargo, los ciudadanos nicaragüenses aunque tengan síntomas podrán ingresar pasando a resguardo domiciliar, cumpliendo el protocolo establecido.
Aeropuerto Internacional Juan Santamaría – Costa Rica
Quienes deseen ingresar a Costa Rica deben contratar un seguro de viaje, puede ser nacional, que cubra los gastos de alojamiento y gastos médicos generados por COVID-19 o puede ser un seguro vigente con cobertura internacional. El aeropuerto abrió sus puertas a vuelos comerciales el 1 de agosto . Los turistas que llegan de Canadá, Reino Unido y La Unión Europea deben contar con prueba PCR y resultado negativo 48 horas previas al viaje. Los pasajeros con destino final Costa Rica deben llenar previo a su llegada un formulario conocido como Pase de Salud.
Aeropuerto de Madrid Barajas Adolfo Suárez – España
La Dirección General de Salud Pública, Calidad e Innovación, relativa a los controles sanitarios condicionó el ingreso de turistas a España bajo ciertos requisitos, como llenar un formulario de control sanitario a través de la dirección de Internet. Los pasajeros con más de 37.5 grados centígrados o los que se sospeche que pudieran padecer de COVID-19 u otra patología transmisible, serán sometidos a una nueva evaluación sanitaria. Si en esta segunda evaluación se confirma que el pasajero pudiera tener un riesgo para la salud pública se coordina con las autoridades sanitarias para llevarlo a un centro médico.