Se llevó a cabo una polémica decisión arbitral en el estadio Kenilworth Road del Luton Town, que recibió al Swansea City por la octava fecha del Championship. El partido culminó 3 a 3, pero una patada criminal de parte del equipo anfitrión apenas recibió una tarjeta amarilla. Rápidamente se viralizó este hecho que tuvo como protagonista a Henri Lansbury.
Iban 28 minutos de partido y el Luton dominaba con tranquilidad 3 a 0 el partido. Sin embargo, se vivió una situación insólita con una patada hacia un jugador rival. El jugador se quejó de que no le daba espacio para patear, pero nada justificó la criminal patada que le propinó al futbolista del Swansea City.
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Got only a yellow card for this!
— BRGoals (@BRGoals) September 18, 2021
Lo más raro para la transmisión y para los seguidores del fútbol fue la decisión del árbitro: una tarjeta amarilla. Por la imprudencia y el hecho de no medir las consecuencias, podría haberle sacado la tarjeta roja. Sin embargo, el juez encargado de impartir justicia decidió que la reacción de Lansbury no fue para tanto.
El Luton Town llevaba una diferencia de tres tantos que consiguió en los primeros 23 minutos de juego. Elija Adebayo había marcado por duplicado -uno de penal- y el restante de Luke Berry. Sin embargo, en el segundo tiempo aparecieron Jamie Paterson, Oliver Ntcham y Joel Piroe -éste último a los 92 minutos- para cerrar en tabla el partido.