El fútbol escocés siempre se encarga de dar alguna sorpresa, ya sea que haya desfiles de botargas, mascotas peculiares o jugadores que hagan partidos con artefactos judiciales en sus cuerpos. Este último caso, es el que está dando como protagonista a Paul McGowan, del Dundee FC, por estar bajo libertad condicional.
McGowan usó este brazalete el pasado fin de semana en la derrota por 2-1 ante el St. Mirren (y al menos por algunos partidos más) por haber sido condenado a libertad restringida por dos meses debido a una agresión al agente de seguridad Andrew MacLaughlan a las afueras de un bar en la ciudad de Dundee.
El volante central de 30 años, ha hecho su carrera deportiva en el Celtic (2005-2011), donde estuvo a préstamo en el Greenock Morton, Hamilton Academical y St Mirren, antes de irse definitivamente a este equipo, donde militó hasta 2014 y está en el Dundee FC desde ese año.
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El futbolista no asistió a la International Champions Cup y se quedó junto a otros compañeros en Barcelona para una preparación diferenciada.
Mcgowan ha protagonizado otra serie de delitos menores, de acuerdo al periódico inglés The Daily Mail, en marzo de 2010 fue detenido por violación de la paz con multa de 200 libras esterlinas, en abril de 2013 protagonizó comportamientos amenazantes y multa de 1,600 libras, en diciembre de ese año repitió incidentes con la policía, por lo que fue condenado a 130 horas de trabajo no remunerado.
Para marzo de 2015 repitió los comportamientos abusivos y los incidentes policiales, allí fue condenado a libertad condicional durante 16 semanas. y este último episodio, del 16 de julio de 2018 por agresión, que terminó en libertad condicional por dos meses, orden de recuperación de la comunidad con supervisión de un año, 200 horas de trabajo no remunerado y multa de 200 libras esterlinas.
Dundee player Paul Mcgowan playing whilst on tag yesterday pic.twitter.com/Wq2HlJ6rNh
— MrTipsbetting (@MrTipsbetting) 5 de agosto de 2018