VIDEO: Elías Ramírez, de Guerrero de playa a liderar el nuevo sueño de la Selecta Femenina playera

Elías Ramírez dejó por un tiempo a la selección masculina para hacerse cargo de la flamante Selecta femenina de fútbol playa que debuta este sábado en el Cifco rumbo a los Juegos Mundiales de la modalidad

Elías va por el título en el CIFCO y la clasificación a los Juegos Mundiales: ???Tenemos esa fe que cualquier atleta debe tener, cualquier equipo, el más humilde que sea, tiene esa sensación de clasificar y buscar el boleto".

Por Gustavo Flores | Twitter: @Gusflores21

2019-08-03 7:30:38

“Nunca imaginé todo esto, uno siempre tiene la esperanza cuando es niño de poder representar a El Salvador, y gracias a Dios se me ha dado. Primero como jugador y ahora en esta etapa de entrenador, que no es nada fácil. Pero es de afrontar todos los retos en la vida, aquí es donde se depende uno y donde se va abriendo camino para ser una persona de bien. Una persona que pueda enseñar los conocimientos adquiridos como entrenador. La etapa de entrenador es muy diferente, hay que tener más comprensión, y más con las muchachas, hay que tener un trato muy especial”.

El que habla es Elías Ramírez, más conocido en el mundo del fútbol playa como “Ronaldinho”, tal como lo apodó Guasma (ex jugador de la Selecta) en su primera convocatoria. “Y ya quedó para siempre”, se ríe.

“Dinho” cuenta sus inicios en el fútbol playa. “Fue por cuestiones económicas. Trabajando en la finca me daban 5 dólares y en la Selección me daban 10. Y jugando al fútbol, que es mucho mejor, con la oportunidad de salir y conocer otros países. Para nosotros la gente pobre, eso no es fácil y, sin embargo, uno se motiva mucho para jugar al fútbol. Gracias a Dios que me llevó a conocer tantos países. Lugares a los que una persona natural y sencilla nunca podría haber viajado”, dijo.

En la finca, empezó a trabajar a los 16 años. “Trabajaba de 6:00 de la mañana a 4:00 de la tarde. Era de ir a limpiar la finca, ir a cortar o hacer cualquier cosa, adaptarse a todo lo que se tiene que hacer en una finca. A veces salíamos temprano y hacíamos tarea. Pero a veces no la hacíamos y no ganábamos esos 5 dólares”. Pero el fútbol fue su escaparate: “A mí se me estaba presentando esa ocasión de poder ir a jugar y me pagaban 10 dólares, comida gratis y dormida. No había dudas, todo era mucho mejor”.

Un sueño

Su llegada a la Selecta de fútbol playa se dio por el Profe Ramón Muñoz, curiosamente hoy su auxiliar técnico en la selección femenina. “Muñoz me vio jugar en el torneo de fútbol 11 en la cancha de California, él me dijo si quería jugar al fútbol playa representando a El Salvador y me explicó todas las condiciones. Ahí opté por jugar en la arena, aunque nunca antes había jugado al fútbol playa. Entré a los 22 años a la Selección y enseguida ya estaba bien adaptado; con la selección también es coraje y no achicarse a nada. Ir a dar el todo por el todo, ‘reventarse’ por el país”.

Elías Ramírez, director técnico de la Selecta Femenina de Fútbol Playa, durante su etapa como seleccionado nacional en el Mundial de Ravenna. Foto EDH / Huber Rosales

Sus épocas de gloria llegaron con la Selecta playera: “Dios me ha permitido vivir los cuatro Mundiales que hemos disputado con El Salvador, pude salir cuarto en el Mundial de Italia. Todo gracias al profe Rudis (Gallo), a la Federación y a todos los que han hecho posible trabajando; todas esas personas que están atrás de un equipo influyen bastante en el rendimiento de la Selección”.

Su paso a entrenador se dio primero en el fútbol once. “Nosotros en California tenemos un equipo de Tercera División y vimos una oportunidad de no pagar entrenador, por eso opté por sacar el curso de técnico clase C y poder dirigir al equipo. Y desde diciembre pasado saqué el clase B. De una u otra forma eso nos ayudará a salir adelante y enseñarle a los niños de nuestro pueblo que puedan desarrollar sus habilidades como debe de ser, no a lo loco. Enseñarle al niño a instruirlo desde pequeño para que cuando llegue de grande a una selección ya no le cueste adaptarse a todo”.

Luego le llegó a Ronaldinho la chance de ser entrenador de la selección femenina. “La oportunidad se dio porque se iba a formar este nuevo equipo y los directivos de la Fesfut me eligieron por varios motivos, yo soy el más viejo dentro de la Selección, tengo el conocimiento de la modalidad. Teníamos poca preparación para esta competencia y las chicas se tenían que adaptar rápido a lo táctico y a lo físico”. Aunque aclara que el sigue vigente también en la selección masculina. Esto sería solo un paréntesis.

Habla de sus dirigidas, las Guerreras: “Ellas pueden jugar bien, pegarle bien al balón, sin embargo no tienen una preparación táctico que es lo que más ayuda aquí. Hay un torneo de Café, de la Asociación Pro fútbol playa. Ahí contactamos a varios monitores para que nos den referencias de las muchachas. Hemos convocado a jugadoras que tienen talento”.

Será el primer torneo oficial para una Selección femenina de fútbol playa: “Gracias a Dios es en nuestro país, nosotros tenemos que demostrar que tenemos garra y corazón para hacer bien las cosas”.

La Selección Femenina de Fútbol Playa tendrá cuatro microciclos de trabajo antes del torneo regional. Foto/Cortesía FESFUT

El promedio de edad del equipo femenino es muy bajo: pocas pasan los 20 años. “Están muy jóvenes, hay muchachas que trabajan, estudian, venden pescado en el mercado. Y hay otras que ayudan a sus familias en sus hogares. La mayoría ralean y también van a pescar”.

El equipo femenino tiene, entonces, una historia parecida a la de los hombres: “Nosotros tomamos en cuenta eso, para que alguien se adaptara a la arena era más fácil traer jugadoras de la zona costera, porque ellas son sufridas y tienen el mismo recorrido que los varones, ahí tanto hombres como mujeres trabajan por igual”.

El tema psicológico será fundamental para ellas en su primer gran prueba ante el público: “Se trabaja en forma adecuada, nosotros vamos a tener a la gente a nuestro favor, no en contra, nos tiene que dar más fuerza, estamos en nuestro pueblo. La presión es normal hemos hecho partidos de fogueo entre comunidades y reaccionaron bien. Además, hay muchas que le pegan bien y fuerte al balón”.

Y la ilusión, Elías, nunca la pierde. Va por el título en el CIFCO y la clasificación a los Juegos Mundiales: “Tenemos esa fe que cualquier atleta debe tener, cualquier equipo, el más humilde que sea, tiene esa sensación de clasificar y buscar el boleto. Hablamos con las chicas de que ellas tienen la posibilidad en sus manos de ganar y poder conocer otro país”. Catar es el premio mayor.