La historia del extriatlonista que es abogado y se desempeña como operario de máquinas de construcción

El extriatleta salvadoreño puso el nombre del país en alto. Se graduó de abogado, pero actualmente reside en Estados Unidos.

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Foto: Cortesía

Por Franklin Ponce | Twitter: @FP11EDH

2019-10-07 6:47:51

Siguiendo los consejos de papá y mamá, Gustavo Zavaleta ingresó a practicar el triatlón, sin pensar que eso marcaría su vida, siendo un digno representante de El Salvador en este deporte.

“Mis padres siempre nos inculcaron desde pequeños a estar activos en el deporte y estudios. En el 2001 junto a mis hermanos iniciamos clases de natación en el Indes Santa Ana con la supervisión del profesor Jorge Hernández, quien le sugirió a mi padre que intentáramos el deporte de triatlón. Desde entonces empezamos a entrenar, como un pasatiempo. Poco a poco fuimos incursionando más en serio hasta que empezamos a competir dentro y fuera de El Salvador”, cuenta Zavaleta.

Junto a sus dos hermanas (Sonia y Stephanie) y su hermano (Raúl), formaron la dinastía de los “Zavaleta”, en este deporte, generando grandes reconocimientos para el país en diferentes eventos: “Crecer en el deporte y compartir todas esas experiencias en familia tuvo un significado enorme en mi vida”, dijo el segundo dentro de este grupo.

Dentro de los premios que consiguió, considera como uno de los más importantes: “Representar a El Salvador en los juegos CODICADER de Panamá, en el 2006, fue uno de los mejores. Ganamos la medalla de plata, fue la primera vez que el triatlón participaba en los Juegos Centroamericanos junior y nadie se esperaba una medalla”, confiesa, todavía con mucho orgullo por esa conquista.

Esto último también lo guarda como uno de los grandes recuerdos que le dejó este deporte. Pero como todo, también hubo malos momentos que son difíciles de olvidar, uno de ellos: “Entrenando ciclismo con un compañero fuimos arrollados por una vehículo en la carretera que conduce a Chalchuapa, dejándome fuera de acción por tres semanas. Aunque resulté con lesiones de consideración y mi bicicleta casi destruida di gracias a Dios que no pasó a más”, explicó.

En plena competencia, representando a El Salvador, Tavo Zavaleta deja la bicicleta para seguir con la siguiente disciplina del triatlón. Foto: Cortesía

Ese momento fue parte de lo que más tarde lo llevó a tomar en cuenta el retiro profesional de este deporte: “Considero que es importante entender que la vida tiene diferentes etapas y hasta cierto punto es necesario compaginarnos con nuestra realidad, en especial la realidad de nuestro país. Me di cuenta que, aunque el deporte me dio muchas glorias y crecimiento personal, es muy difícil vivir del deporte; además tenía otras metas personales: el obtener un título universitario y desarrollarme como profesional”, detalla el ex atleta nacional.

“Soy operador de maquinaria pesada para una compañía de materiales de construcción en Georgetown, Texas. Mi trabajo en la empresa es de alto riesgo, pues una desconcentración puede generar un accidente de graves consecuencias, por lo que se hace necesario estar muy atento”, señala.

A pesar de que disfruta de su trabajo, Zavaleta también expresa que uno de sus sueños es ejercer profesionalmente como abogado: “A mediano plazo espero seguir aprendiendo y desarrollarme como profesional en mi campo. A largo plazo, espero ejercer mi profesión como abogado y ayudar a otras personas en diferentes ramas del derecho. En lo personal espero, Dios mediante junto a mi amada esposa (Raisa), procrear hijos y gozar de una linda familia”, concluyó.

Sobre el deporte, ahora solamente hace ejercicio como un hobbie. Sin embargo, no pierde el cariño por el triatlón, del que espera reaparezca el apoyo: “Para obtener mejores resultados es necesario contar con un buen apoyo económico de parte del gobierno central”, detalló.

Gustavo Zavaleta hace un par de meses se casó con Raisa, con quien reside en EE.UU., donde también el ex triatleta trabaja en el área de la construcción. Foto: Cortesía