Sonsonate se hizo fuerte defensivamente en su estadio, pero frágil en el ataque, con un buen desempeño en el primer tiempo, pero desaparecido en el segundo. Mientras Alianza, que al final tuvo las mejores ocasiones, terminó sacando el empate a cero de visita, terminó siendo valioso en esta serie semifinal, que tendrá la vuelta el domingo en el estadio Cuscatlán.
Ambos conjuntos no consiguieron anotar en el estadio Ana Mercedes Campos por lo que el pase a la Final del torneo Apertura 2019 dependerá de lo que suceda este 15 de diciembre en el Cuscatlán
Para eso, Rubén Da Silva, técnico de los cocoteros, no salió a esconderse como local y aunque Alianza mantuvo su estilo enfocado en la posesión del balón, fueron los que generaron más peligro en el primer tiempo, primero con un cabezazo de de Roberto González (5′) y luego con un remate de William Maldonado (10′), ambos desviados.
Pero a pesar de estas ocasiones, era un partido parejo, pues Alianza aguantó estas jugadas y tuvo llegadas, que no pesaron mucho, hasta que se basaron en el error de los occidentales, quienes permitieron un tiro de Marvin Monterroza, que exigió al meta William Torres (28′) y luego, un pase atrasado que llegó a Raúl Peñaranda, quien se quitó al meta y al disparar, la pelota pegó en el poste y fue rechazada por la defensa (33′).
A arriesgar
En el segundo tiempo, Sonsonate tuvo que arriesgar, porque necesitaban aprovechar la localia, para aumentar el margen de error en el partido de vuelta, el domingo, en el Cuscatlán, donde los paquidermos no han perdido en este torneo y contra los cocoteros aumentaron a 23 los partidos sin perder.
Polillita Da Silva adelantó líneas, pero el mayor riesgo lo tenían atrás, donde sufrieron al primer minuto de la reanudación con un balón en profundidad a Peñaranda, que rechazó Torres (46′). Tres minutos después se sumó una llegada por la izquierda de Alex Larín, quien tiro cruzado, pero desviado, que estuvieron cerca de rematar Peñaranda y Cerén (49′).
En buen salvadoreño, Da Silva era un demonio en el área reclamándole a sus pupilos, para que no perdieran la idea de juego y volvieran a proponer con sentido, ya que habían perdido claridad ofensiva. Los cambios, Sonsonate los tuvo hombre por hombre, para no perder tampoco la estrategia. Pero fue difícil ver una mejoría y la afición, con el correr del tiempo se fue desesperando.
Alianza estaba haciendo un juego inteligente y no tenía prisa. Controlaba los tiempos y obligaba a los sonsonatecos, quienes poco a poco fueron cayendo en desesperación y cada vez se fueron situando más lejos de la portería rival, aunque al final se les presentaron algunas llegadas a las cuales tampoco le sacaron provecho.
Alianza se cerró y se fue conformando con el empate sin goles, que les da la oportunidad que con otro empate lo estará metiendo a la séptima final consecutiva. Los cocoteros necesitaran de un gol para clasificar, sin embargo, en este toeneo solo ganaron dos partidos, de doce que jugó fuera del escenario sonsonateco.