El Santa Tecla logró el resultado mínimo que era el 1-0 contra el Real Estelí de Nicaragua, para clasificar a los octavos de final de la Liga Concacaf, tras la caída de 2-1 en el Nacional de Managua, la semana pasada. Ese gol marcado en suelo nica terminó pesando, ya que el global acabó en 2-2. Los pericos enfrentarán al San Carlos de Costa Rica en esa siguiente fase.
Necesitado de ganar el partido, de entrada el técnico Rodolfo Góchez planteó un esquema más ofensivo, con una línea de tres defensores, renunciando a los cuatro zagueros que habitualmente ocupa. Esto, pensando en el daño que les hizo el rival en el partido de ida, cuando contragolpearon y enfocaron el juego por las bandas.
Un medio campo poblado con Rodrigo Rivera destruyendo el fútbol nica, Wilma Torres por izquierda y por el otro costado Wilfredo Cienfuegos, dos hombres de mucha velocidad y desequilibrantes. La creación recayó en Gilberto Baires y Gerson Mayén que se encargaron de alimentar a Ricardinho y Armando Polo.
Con esa puesta en escena, otra buena nueva que tuvo Tecla es que Lucio Barroca y Juan Barrera no estaban en el once titular del Tren del Norte. El primero por decisión técnica y el segundo por enfermedad salió de última hora del equipo que había dispuesto el técnico Sergio Rodríguez.