Ya no hay mañana. Es ahora o hasta la próxima, que no saben cuando llegará. Platense y Destroyer disputan esta tarde la finalísima de la Segunda División, que definirá al ascendido a la Liga Mayor.
Los galleros llegan a este equipo en su calidad de campeón del torneo Apertura 2020, tras superar por penales a Destroyer. Sin embargo, el fin de semana anterior, los portuarios tomaron venganza, al ganar por la misma vía (los penaltis), con el que generaron este partido extra por el ascenso.
Platense, la semana anterior, perdió la oportunidad de subir directo, tras perder una ventaja de tres goles, que los de La Libertad igualaron a segundos de cumplir los noventa minutos, alargando la definición hasta los penales, donde el portero Gerson López se convirtió en la figura.
Platense sueña con volver a la Primera División, después de 41 años, donde conquistó un titulo nacional (1974-1975) y la Copa Interclubes de la Uncaf (1975).
Mientras Destroyer ilusiona a su afición con volver a ver fútbol de la Liga Mayor, con la promesa de que no venderán la categoría, como lo hicieron en 2015, cuando lograron ascender, pero terminaron cediendo el derecho al Sonsonate.
Para este compromiso, la dirigencia de la Liga de plata bajó los precios, para que los aficionados de ambos equipos puedan disfrutar de este partido, que el fin de semana anterior contó con un buen número de público.
Una duda
En fase regular fueron los dos mejores equipos de cada grupo, las rondas siguiente pasaron con algo de sufrimiento, agregando dramatismo en la final.
Ahora, todo vuelve de cero. Por lo que esta semana ha sido de mucha concentración, al conocer lo que el otro puede hacer.
La preocupación está en los viroleños, quienes hasta último momento conocerán si podrán contar con el defensor colombiano Wilber Arizala, quien salió tocado del último partido, de quien los galleros resintieron la ausencia para los minutos siguientes. Por su parte, Destroyer está completo para cumplir con este compromiso.