La Selección de Italia fue la primera en clasificarse matemáticamente a los octavos de final de la Eurocopa, luego de imponerse en casa a una Suiza que dejó mucho qué desear, y que vio abrumada en los primeros minutos ante el vendaval del rival.
Italia volvió a salir con todo en los primeros minutos, lejos está aquella imagen de equipo ultradefensivo y efectivo en ataque de antaño. Ahora propone desde el arranque, genera llegada con velocidad, con verticalidad, abre la cancha por las bandas y llena de centros las áreas rivales.
Sufró Suiza el empate, se vio arrinconada, y sacaba agua del racho que le apedreaban constantemente. Adelante, poco o nada, sin idea, se veía cortado en todas sus líneas a la hora de salir, de proponer. Más allá de un par de llegadas sin mayor sentido, no tuvo ninguna clara en todo el primer tiempo.
En cambio, Italia se veía cada vez más cerca. Incluso, le anularon un gol a través del VAR a Giorgio Chiellini. El capitán tocó la bola con la mano en un tiro de esquina antes de mandarla al fondo de la cabaña de un meta Yann Sommer que se quedó petrificado en el área chica, como en otros centros.
Poco después, Chiellini tuvo que abandonar el encuentro lesionado, pero Italia no lo resintió. Lejos de eso, al par de minutos de la modificación consiguió desequilibrar el empate en un contragolpe que inició Manuel Locatelli, con un cambio de juego espectacular, y que él mismo concretó.
Domenico Berardi recibió y corrió por derecha, amagó y piso área y, una vez ahí, aprovechó los movimientos de sus compañeros para crear espacio y para ponerle un pase perfecto a Locatelli, quien llegó a empujar el balón para el 1-0 (26").
Tras ello, Italia dosificó el asedio, y jugó inteligente, sin arriesgar demasiado, aunque tampoco sin tirarse del todo atrás. Más bien, parecía que la tarea pasó de hacer gol a evitar que Suiza convirtiera una vez cumplida la primera misión.
En el complemento, Suiza lo intentó pero tuvo pocas. La más clara, un remate de Steven Zuber que paró con una pierna el arquero Donnarumma, y cuando ya los italianos ganaban por 2-0.
Y es que, al 52", Locatelli firmó el segundo con un remate seco en la frontal del área ante una defensa dormida, y que mandó pegado a la base de un poste.
Y ya cuando el partido se acababa, un remate cruzado y desde fuera del área de Ciro Immobile fue la cereza al pastel para el 3-0. Con ello, Italia se aseguró la clasificación a los octavos de final de la Eurocopa y llegó a 29 partidos seguidos sin perder.
Ahora, comanda su grupo con 6 puntos, seguido de los 4 de Gales. Mientras que Suiza se quedó con 1 y Turquía, con 0.
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