Cuando Marcelo Bielsa visitó El Salvador

De la mano del mundialista Jaime Rodríguez y la fundación Fútbol Forever, el entrenador argentino Marcelo Bielsa nos visitó en diciembre de 2009. El entrenador captó la atención de todos los medios locales de comunicación y de Honduras, que viajaron especialmente para cubrir la estadía del rosarino en ese país.

La agenda del entrenador, en aquel entonces de la selección chilena, contempló la visita a dos centros de la fundación (uno de ellos en la Colonia Campanera) y una charla en la Universidad Francisco Gavidia. El rosarino mostró una profunda conciencia social en cada una de las actividades programadas.

Rescatamos sus palabras en declaraciones que brindó en una de las canchas de la colonia mencionada. Ni el sol, ni el calor, ni el polvo, evitaron que Bielsa abriera su corazón para mostrarse lo más humano posible tanto a niños como prensa. Estas reflexiones las tejió Marcelo para abrigar y dar consuelo a quienes perdieron la esperanza en la vida y en el fútbol local. Esto fue parte de lo que el “Loco” Bielsa compartió en una improvisada pero sesuda clase de filosofía:

“Quería decirles dos o tres cosas. Lo importante que es luchar. A nosotros muchas veces en el fútbol perdemos, pero si luchamos llegamos al vestuario y yo quisiera ver de transmitirles esto. Cuando perdemos, y estamos tristes por haber perdido, estamos tranquilos y no luchamos, estamos avergonzados y no luchamos. Quiere decir que no se trata únicamente de ganar o de perder en el fútbol, sino de haber hecho, de haber luchado”.

“Pareciera solamente que el que triunfa es el valioso. El valioso no es el que triunfa, sino el que lucha. Todos somos perdedores, hay muy pocos ganadores, pero hay perdedores dignos porque lucharon, y perdedores que se pervirtieron. No pervertirse es una forma de triunfar”.

“Quería comentar también otra cosa que tiene el fútbol, que para mí es muy aplicable a lo de ustedes. El fútbol es el deporte rey, el deporte más importante del mundo ¿ustedes se imaginan por qué le gusta tanto a la gente? Mi idea es que le gusta tanto a la gente porque puede ganar el más débil, no siempre gana el más poderoso o el mejor, gana el más débil. ¿Pero cómo hace el más débil para ganar? No gana por poderío, porque son más grandes, porque son más fuertes, porque tienen más recursos, sino que ganan porque usan la imaginación, usan la fantasía, la creatividad, y eso también puede servir como un estímulo para ustedes que tienen poco. Porque sino tienen demasiado con imaginación ¿vieron que los chiquitos, no sé cómo hacen pero se sacan de encima a los grandotes. Que el gol que define un partido lo hace uno bajito marcado por un grandote, vio que el más atento le gana al desatento, aunque el desatento tenga la camiseta de un poderoso y el atento el club más pobre, bueno, entonces hay esperanza”.

“El mensaje del fútbol es ese, que el peor puede ganar, que el más débil puede ganar”.

Thank you Marcelo! pic.twitter.com/4hf8T0QW8Z

— Leeds United (@LUFC) July 18, 2020

“Otra cosa que quería decirles es que también es muy importante, valorar lo que uno tiene, esto que parece tan precario al lado del césped del Camp Nou, por ejemplo, también puede ser lindo con el esfuerzo de todos los días. A lo mejor nunca van a lograr que tenga un césped perfecto, pero sí pueden decorar el arco, ponerle una cinta blanca abajo. Ese orgullo de decir, yo he visto muchas casas humildes que están más afectuosamente tratadas que mansiones de poderosos, donde se nota el cariño de defender lo poco que uno tiene. Cuando empecé a entrenar no había conos, agarramos unas varillas, las pelábamos con un cuchillo y tirábamos agua en la tierra porque no entraban. Hay veces que uno se fija en lo que no tiene y encuentran en lo que no tienen una justificación para no crecer, pero la imaginación, esa que los pobres la tienen muy, muy desarrollada, es una aliada para todo esto”.

“Para evaluar, para comparar no hay que ver quién llega más arriba, sino el trayecto que superó uno y otro. Algunos ignoran de dónde partieron. La vida no se trata de quién llega más alto, sino de la distancia que ha logrado cada uno recorrer. Se debe ver de dónde partí, qué herramientas tuve y en qué marco moral crecí. El agradecido soy yo, por estos pocos momentos que he compartido con ustedes”, cerró en una de las “polvosas” de La Campanera.

Como anécdota curiosa, ya en la Gavidia, durante la ronda de preguntas periodistas hondureños cruzaron al “Loco” para preguntarle sobre su selección, y es que los chilenos habían vencido a los hermanos centroamericanos en un amistoso en el año en que el argentino nos visitó. También, ambas selecciones se enfrentaron al año siguiente en la Copa del Mundo Sudáfrica 2010. Las apreciaciones de Bielsa para la prensa hondureña fueron casi nulas, el “Loco” estaba en otra cosa.