En tiempos donde el Barcelona F.C. vive con múltiples problemas, porque además de que su fútbol es muy cuestionado y marcha a media tabla, tiene serios líos financieros, la mayoría de las culpas se le echan al expresidente Josep María Bartomeu.
Catalogado como uno de los peores dirigentes que ha tenido, por el mal manejo de fondos en el sentido de comprar jugadores que no han rendido, de crear una crisis en la que casi se marcha Lionel Messi, y de no obtener buenos resultados, hay alguien que dijo: “Momento, aquí el peor presidente de la historia he sido yo”.
Sí, increíble, pero cierto. Pero aunque Bartomeu tuvo que renunciar porque sino lo echarían debido a su mal desempeño, hay alguien que ha levantado la voz para “reivindicarse”, si eso es posible, como el más malo de los directivos del club en su historia.
Se trata de Joan Gaspart, quien estuvo al frente del equipo entre 2000 y 2003. “El peor presidente de la historia del Barcelona soy yo, no Bartomeu”, aseguró así, tajante, en declaraciones que brindó al periódico español El Mundo.
Tiraron la fase previa del C.A.El multimillonario empresario hotelero, hoy de 76 años, justifica su frase porque no pudo lograr que Luis Figo, entonces figura del Barcelona, se quedara en el equipo. El volante portugués terminó firmando por el Real Madrid apenas dos días después de que Gaspart asumiera como presidente (era el vice antes).
La llegada de Luis era una promesa de campaña de Florentino Pérez, quien asumió como mandamás del Real Madrid en 2000, y cumplió con su promesa. Para ello, pagó una cláusula de rescisión de 10 millones de pesetas, aproximadamente 70 mil 517 dólares al cambio actual.
“Figo me llama y me dice ‘Juan tengo dos billetes uno Lisboa-Madrid y otro Lisboa-Barcelona. De ti depende que vaya a Barcelona’. Florentino hizo una jugada por la que me pidió disculpas y me reconoció que no era justa su propuesta, solo pensó en ganar las elecciones. Yo le dije a Luis que ya lo arreglaremos, pero él me dijo que la única posibilidad que viniera a Barcelona es ‘que fuera con una chequera de LaCaixa de 500 millones de pesetas’. Yo le dije que eran las 12 de la noche y era imposible que consiga el cheque. Le dije ‘ven a Barcelona y nos haremos cargo de la operación’”, reseña el medio.
Ante esto, Figo pidió un “aval bancario, no ve vale la promesa. Lo siento mucho si no hay aval me voy a Madrid”. A lo que Gaspart, ahora comenta que “él era muy joven. Era algo ilegal” lo que le pedía.
“Como culé, me he sentido traicionado. Lo que sí que he hecho con Figo es pedirle un cara a cara para explicar el tema, pero nunca he tenido respuesta. No ha habido forma”, contó.
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