Futbolistas que evaden rivales e impuestos

La lista de figuras evasoras del fútbol sigue en alza, un problema nada nuevo en el balompié de élite

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Por El Diario de Hoy

2017-06-23 9:03:32

Las transacciones millonariamente en el mercado de las piernas están a la orden del día. En ese baile de millones, siempre hay sombras… en los últimos meses, autoridades españolas investigaron a deportistas de élite y sus complejas estructuras para esquivar obligaciones tributarias.

La Fiscalía española denunció al técnico portugués José Mourinho por defraudar 3.7 millones de dólares provenientes de derechos de imagen, y habría utilizado para ello empresas con sede en paraísos fiscales, la misma táctica ocupada por varias estrellas del deporte rey en España. Al igual que Mou, el futbolista Cristiano Ronaldo también está en el punto de mira de los fiscales de Hacienda. La estrella del Real Madrid fue citada por un juzgado de Madrid por defraudar unos 16.3 millones de dólares. Tendrá que presentarse el 31 de julio.

Otro futbolista destacado en esta lista negra es el “Jefecito” Javier Mascherano, del Barcelona, quien aceptó en enero pasado un año de cárcel por defraudar 1.7 millones de dólares, que entregó a Hacienda, más una multa de 945 mil dólares. Gracias a ello, “Masche” no estuvo tras las rejas.

También hace poco el Tribunal Supremo de España confirmó la condena a 21 meses de cárcel por delito fiscal impuesta a Lionel Messi, otro del Barcelona, por defraudar la cantidad de $4.5 millones, ganados por el rubro de derechos de imagen. Ni Messi ni Mascherano tuvieron que ingresar en prisión al ser condenas inferiores a los dos años, eso sí, siempre y cuando no cometan otros delitos.

Los líos de CR7

En el caso de Ronaldo, la Fiscalía también se basó en un informe de la Agencia Tributaria ibérica para acusarlo de crear una sociedad para defraudar de forma “voluntaria”, y le asigna cuatro delitos contra la Hacienda Pública cometidos entre 2011 y 2014.

Aunque CR7 sólo ha dicho públicamente que está “con la conciencia tranquila”, y que sus allegados alegan que ha hecho sus declaraciones tributarias de forma correcta, desde el entorno del futbolista ha trascendido que está a disgusto con el Real Madrid, pues consideraría que el club no le ha defendido con la solidez esperada. Medios como el portugués A Bola y la BBC británica consignaron que Cristiano ya decidió irse del club blanco.

De momento, el crack está concentrado en la Copa Confederaciones; y el presidente madridista, Florentino Pérez, dijo que hablará con su estrella tras la competición.

Hay otro madridista bajo la lupa. Nuevas revelaciones del caso Football Leaks confirmaron que Sergio Ramos tuvo intención de evadir impuestos mediante una sociedad radicada en el paraíso fiscal de Islas Vírgenes. “La idea inicial era hacer físicamente opacos los beneficios procedentes de sus derechos de imagen”, confirma la Fiscalía.

Sin embargo, el jugador no sólo no evadió ni un solo euro sino que pagó de más, por error en sus declaraciones fiscales de 2011 y 2012.

La Fiscalía de Madrid no pudo, por tanto, denunciar a Ramos porque su “agilidad” a la hora de gestionar el fraude reportó a la Hacienda pública una recaudación extra de 7.3 millones de euros, el doble de lo que tenía que pagar, más los gastos derivados de tres sociedades -Ramasa, Sergiasa y Campeonasa- de las que tenía que sacar partida, pero que finalmente no supo usar y ocasionó al futbolista un gasto no agendado.

Y esto no se detiene, con tres exmadridistas en la mira. La Fiscalía también se querelló contra Fabio Coentrao (el Madrid lo ha cedido al Sporting), por defraudar 1.43 millones de dólares entre 2012 y 2014, y antes lo hizo contra el argentino Ángel Di María (hoy en PSG) y Ricardo Carvalho (milita en el Shanghai chino) por delitos fiscales.

Y no todo es color de rosa para uno de los agentes más adinerados en el fútbol. Jorge Mendes, representante de Cristiano y Falcao entre otras figuras, fue citado judicialmente como imputado en la investigación del presunto fraude fiscal del colombiano, actual jugador del Mónaco, por 6.3 millones de dólares en 2012 y 2013, cuando era futbolista del Atlético de Madrid.

Otro de los casos sonados es el del brasileño Neymar. El fondo de inversiones de su país natal, que poseía el 40% de los derechos deportivos de Neymar, presentó una querella ante la justicia, pues se consideró perjudicado en el traspaso del delantero brasileño de Santos al Barcelona.

Según los cálculos del juez del caso en Barcelona, el costo del paso del Santos al club catalán habría alcanzado los $91 millones, contrario a lo que dijo el expresidente del club catalán Sandro Rosell, quien aseguró que el pase se hizo por $62.3 millones.

Por esta razón, el tribunal de justicia de Barcelona procesó al delantero brasileño y al club de la Ciudad Condal por estafa y corrupción entre particulares en el fichaje. El proceso en contra de Neymar está activo.

AS Monaco's Falcao reacts at the end of his match against Lille during his French Ligue 1 soccer match at the Pierre Mauroy Stadium in Villeneuve d'Ascq

No será el último caso, pues muchos nuevos saldrán a la luz en los próximos días, siempre que los millones de dólares alrededor de las figuras del fútbol sigan su danza.
Nada nuevo bajo el sol

Esta práctica de evadir obligaciones fiscales no es un invento del “fútbol moderno”. Hay casos que vale la pena recordar para poner en tela de juicio la discutible ética de varios futbolistas en el viejo continente.

Diego Maradona tuvo inconvenientes con el fisco italiano cuando jugó para el Nápoli, a mediados de los 80s, por cuenta del pago del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF). El monto inicial era de 7 millones de euros, pero en vista de que el astro argentino se demoró en el pago, la deuda creció hasta los 39 millones (43.5 millones de dólares).

Otro caso “vintage” es el del brasileño Romario, quien fue condenado por la justicia española a tres años de cárcel por evasión fiscal. Además, se le impuso una multa de 890.000 dólares por omisión de información a la Hacienda sobre las ganancias obtenidas entre 1996 y 1997, cuando jugaba en el Valencia.

Y cabe recordar cuando el tribunal de justicia español le exigió a Luis Figo el pago de 2,4 millones de euros por el IRPF que evadió en su época como jugador de Barcelona, entre 1997 y 1999. En 2012, el portugués presentó un recurso, pero no fue tenido en cuenta por el tribunal.

No es un secreto que en este mundo los ricos quieren ser más ricos y hacen todo lo posible para aumentar sus fortunas. Futbolistas incluidos. Para frenar esta avalancha, la Comisión Europea (CE) presentará una propuesta que forzará a los intermediarios fiscales (bancos, consultores, abogados) a informar a las autoridades tributarias cuando proporcionen asesoría que pueda ayudar a evadir impuestos.